Las opciones de meriendas nutritivas para los paseos son tan amplias como pueda ser tu imaginación. Te ofrecemos varias sugerencias:
Los sándwiches son un clásico y permiten mucha versatilidad. Lo mejor es no llevarlos preparados para así poder preservar al máximo la frescura del pan. Lleva en envases separados todos los ingredientes que desees (quesos, jamón, salchichón, atún, lechuga, tomate, cebolla, alfalfa, pepinillos, etc.), junto con las salsas o aderezos que consideres pertinentes, y que cada quien se los prepare a su gusto en el momento.
Las ensaladas siempre son una buena opción. Puedes llevar dos tipos diferentes; por ejemplo: una con mayonesa (la clásica ensalada de gallina o una de pasta con atún) y otra a base de lechuga, verduras mixtas y algún elemento proteico como jamón y queso. Esta última llévala seca y sólo aderézala, de preferencia con una vinagreta ligera con hierbas, al momento de servirla.
Prepara una ensalada de frutas con trozos de piña, manzana, mango, patilla y melón.
Haz una torta sencilla tipo ponqué.
Las compotas o colados de frutas son una maravillosa opción y a todos les encantan, incluyendo a los adultos.
En cuanto a bebidas, además del agua indispensable, puedes llevar ya preparada una Bebida Achocolatada y o jugos de frutas naturales.
Finalmente, en todo paseo o excursión no pueden faltar las barras de chocolate.
Llevar meriendas nutritivas cuando salgas de paseo con los tuyos es mucho más fácil de lo que puedes imaginar.