Trómpiz se caracterizó por destacar en sus piezas de arte, a la figura femenina, ambientada sobre fondos decorativos donde juegan el armonioso colorido de una escenografía tropical formada por telas, cortinas y alfombras.
Sus pinturas lograron la masificación, tanto así que se podía apreciar una obra de su autoría en cualquier morada venezolana.