Una joven de 26 años de edad se debate entre la vida y la muerte recluida en una clínica de la capital mirandina tras someterse el pasado jueves a un procedimiento estético de inyección de biopolímeros para aumento de glúteos.
El caso se conoció luego de que las pesquisas del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) detuvieran al enfermero que se hizo pasar por médico estético y realizó el procedimiento prohibido en un consultorio ubicado en el grupo Clínico Los Teques, en la avenida Independencia.
El jefe de la subdelegación Los Teques del Cicpc, comisario Franklin Morales, refirió que tras recibir la denuncia de los familiares, este lunes acudieron al consultorio donde Dayana Mendoza de 26 años de edad, se había realizado un procedimiento médico estético y se le había inyectado biopolímeros de manera ilegal.
“Al parecer el enfermero haciéndose pasar por médico estético, tras realizar unos cursos de esa técnica y aplicar el medicamento que está prohibido por el Ministerio de Salud, inyectó el producto en una vena y fue a dar al torrente sanguíneo ocasionándole una tromboembolia pulmonar y una deficiencia respiratoria aguda que la hicieron caer en estado de coma a causa de un paro respiratorio”, dijo.
Según testigos allegados a la víctima, Mendoza se había dirigido el pasado jueves 4 de octubre al consultorio cercano las 5 de la tarde. Salió a las 7:00 p.m. y no pasaron ni dos horas cuando comenzó a sentirse asfixiada y perdió el conocimiento. Fue trasladada en un principio por los paramédicos al Hospital Victorino Santaella (HVS) donde fue remitida a un centro clínico privado debido a la gravedad de la lesión y cayó en estado de coma.
Los familiares acudieron el fin de semana a denunciar ante el Cicpc el hecho en que casi pierde la vida la joven, trabajadora de una tienda textil y residenciada en la comunidad Aquiles Nazoa, quien canceló 5 mil bolívares fuertes para inyectar sus glúteos. La joven es madre de una niña de cuatro años de edad.
“A veces la vanidad cuesta un poquito y antes de someterse a este tipo de operaciones es preferible investigar un poco más porque estamos jugando con nuestro cuerpo y con nuestra vida”, dijo el jefe policial.
Señaló que quienes se someten a este tipo de procedimientos pueden perder la vida, y que el diagnóstico médico no da esperanzas de recuperación total a la joven.
Tras la investigación y los interrogatorios a familiares dieron con el paradero de Willian Esteban Rodríguez Sequera, de 45 años, quien quedó a la orden del Ministerio Público; el detenido es enfermero y tenía varios meses con un consultorio alquilado en el centro clínico donde realizaba el procedimiento.
El jefe policial señaló que están trabajando en la recuperación de los equipos médicos que empleaba el enfermero y los medicamentos.
DC/La Región.