"Estoy muy enfadado con el grupo que rodea a Lindsay. Mi aviso a todas las influencias negativas en las vidas de Lindsay y de mis otros hijos es que, esta vez, han traspasado la línea y han querido abarcar demasiado. ¡Mi familia no seguirá su moral distraída! ¡Las cosas van a cambiar! Estén seguros", escribió Michael en un correo electrónico al periódico New York Post.
Mientras tanto, la madre de Lindsay, Dina, está urgiendo a su hija para que consiga una orden de alejamiento permanente contra Michael, aunque la actriz considera que la medida es demasiado dura, puesto que prohibiría incluso recibir llamadas, mensajes o correos de su padre.
La actriz dijo que había "acabado" con su padre después de que él traicionara su confianza haciendo pública una conversación en la que Lindsay supuestamente le contó que su madre había estado consumiendo cocaína.
"Le dije a mi padre una mentira muy dañina sobre mi madre. Ella no consumió cocaína. Que las hijas discutan con sus madres es normal, sucede mucho", aseguró Lindsay.
En este sentido, el padre de la intérprete está convencido de que es de su madre de quien realmente deberían estar protegidos sus hijos.
"Supongo que Dina se enteró de que quiero que los Tribunales y los Servicios de Protección de Menores la investiguen", comentó Michael al portal TMZ.
DC/El Nuevo Herald