Briceño , quien estaba solicitado por el delito de secuestro con fecha de 10 de septiembre de 1982, estaba en el negocio cuando vio llegar a un hombre joven.
El supuesto cliente pidió varios productos mientras verificaba que podía darle muerte a Briceño sin ser visto. Cuando el sexagenario se acercó para entregar lo que pedía, lo sorprendieron los balazos.
Fuentes policiales informaron que el infortunado también presentó antecedentes policiales por el delito de robo, en los años 1995 y 1996, ambos por la sub delegación del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas de Maracaibo. Voceros policiales presumen que se trate de un ajuste de cuentas.