En una intervención en la Casa Blanca cinco días después de la matanza en una escuela primaria de Newtown, en Connecticut, donde resultaron asesinados 20 niños y seis adultos, Obama dijo que respalda el derecho de los ciudadanos a tener armas, pero sólo dentro de “límites responsables”, y que el país tiene la “profunda obligación” de contener la violencia armada.
Asimismo llamó a poner fin a la "epidemia" de violencia que afecta al país "cada día”, y que ocasionó la tragedia de Newtown ocurrida el pasado viernes, luego que Adam Lanza arremetiera contra la escuela primaria Sandy Hook, después de haber asesinado a su madre y antes de quitarse la vida.
El presidente subrayó también, durante su comparecencia en la Casa Blanca, que la "mayoría" de los estadounidenses apoya prohibir la posesión de armas de asalto y no quiere que las armas estén en poder de personas que no estén capacitadas para utilizarlas.
"Sabemos que este debate va a generar mucha controversia. Las leyes no van a prevenir sólo estos sucesos, también tenemos que adoptar medidas sobre la salud mental y para evitar la glorificación de las armas", aseguró Obama.
Asimismo, el mandatario dijo que la mayoría de los poseedores de armas en EEUU "las tienen de manera legal y las utilizan de manera responsable", y agregó que "tener un arma y tener sentido común no son incompatibles", pero afirmó que hay que trabajar para que no acaben en manos inadecuadas.
"Esta iniciativa va a requerir mucho compromiso y valentía", advirtió Obama. "Si la colaboración y el sentido común prevalecen, estoy convencido de que podremos hacer algo para evitar que este tipo de violencia se repita".
DC/Infobae