El Negrito salió del retén El Marite por la puerta grande, el pasado diciembre. Un primo que no se identificó contó que él y un compinche se escaparon por la puerta principal al culminar la hora de la visita, y desde ese entonces estaba haciendo de las suyas.
Ocando es el responsable de la muerte de Freddy Morales, conocido en el 18 de Octubre como Papá Chicho.
Ocando llegaba a su casa todos los días a las 5.00 de la mañana, después de delinquir.
El pasado martes El Negrito y su compinche Deivis Chacín atracaron a un vendedor de agua, toda la comunidad se dio cuenta, pero nadie se atrevió a decirle nada. Sólo Chicho lo aconsejó, y por eso encontró la muerte tres días más tarde.
Le dijo que no hiciera eso. Le explicó que si él Ocando- pedía dinero ellos se lo podían dar. Pero a mi primo le quedó el resentimiento y por eso lo mató.
El familiar del homicida contó que Morales llegó a su negocio el sábado a las 6.00 de la mañana, lo acompañaba uno de los empleados. Chicho limpiaba el frenten y el empleado limpiaba en el interior. En ese momento llegaron El Negrito y Deivis, contó el testigo.
Deivis no apagó la moto, se quedó estacionado a una cuadra del lugar de los hechos, mientras que Ocando se le acercó al comerciante por detrás.
Chicho estaba armado, pero a El Negrito no le importó, le dijo dame 20 bolívares, fue lo único que hablaron. Chicho se puso de frente; estaba confiado se colocó el arma debajo del brazo y sacó su cartera.
Antes de que Morales sacara el dinero que le pedía el malandro, éste sacó un arma u le dio un disparo en el abdomen, causando su muerte. Antes de escapar se llevó una cadena de oro y el arma de Chicho.
Asustado, José Ocando se refugió en la casa de un vecino cuando llegó la policía a buscarlo. Recibió a los policías a tiros, les disparó con el arma que él tenía y con la que le robo a Chicho, pero cuando se le acabaron las balas, los policías entraron y lo mataron.
El único familiar de Ocando que se atrevió a contar la triste historia, explicó que el muchacho usaba la cadena de oro que le había robado al comerciante horas antes.
La comunidad lo llora
Freddy Morales era una excelente persona. Solo tenía ocho días con la carnicería. El día que la inauguró asó 300 kilos de carne, todos comimos y bebimos, hasta El Negrito.
Chicho era querido por todos. Hasta por cinco bolívares pordía venderle un kilo de carne al que le pidiera.
El día que despidieron al carnicero todos los habitantes de la barriada asistieron a casa, se lamentaban y no pidían creer que el mismo muchacho que vieron crecer, y a quien Morales ayudó varias veces, le quitara la vida de manera despiadada.