Tras el primer abuso la dama decidió perdonarlo, pero dos meses después repitió la aberración. Fue allí cuando decidió denunciarlo ante las autoridades.
Por su parte, el sentenciado afirmó que se había sentido excitado sexualmente por un contacto accidental con el trasero del animal, por lo cual procedió a tener relaciones sexuales de manera forzosa con él.
DC/ sdpnoticias