El anterior suceso dejó como saldo tres personas fallecidas y varios heridos. La responsable de organizar la carrera, Mary Wittenberg, declaró a al agencia EFE que la seguridad es y será siempre nuestra máxima prioridad.
Para ello, «seguiremos trabajando hombro con hombro con la ciudad de Nueva York y el Departamento de Policía mientras planificamos los próximos eventos», añadió Wittenberg.
La maratón de Nueva York se celebra tradicionalmente a comienzos de noviembre, aunque la última edición hubo de suspenderse debido a los daños causados en muchas zonas de la ciudad por el huracán «Sandy».
La edición de este año está prevista para el 3 de noviembre, y se espera que acudan en torno a los 40.000 corredores a la prueba, una de las más populares de todo el mundo.