Así lo han constatado en un estudio en hurones sanos, animal más utilizado para investigar la gripe humana. Pese a situarlos en una jaula separados de otros animales infectados con esta cepa del virus, uno de cada tres se acabó contagiando a través del aire.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ya ha dicho que no tiene pruebas de una «transmisión sostenida» del virus de humano a humano, que ha matado a 36 personas en China.
«Los resultados sugieren que la posibilidad de que este virus evolucione aún más y dé pie a una futura pandemia no se puede descartar», dijo el equipo de investigación, dirigido por el experto en gripe aviar y microbiólogo, Yi Guan.
El equipo también encontró que algunos animales infectados no desarrollan fiebre u otros síntomas, lo que indica que pueden producirse infecciones asintomáticas, lo que haría que el virus sea más difícil de detectar y controlar.
El virus también puede infectar a los cerdos, pero no ha podido transmitirse de cerdo a cerdo o de cerdo a otros animales, según el estudio, aunque el equipo instó a las autoridades a mantener la vigilancia para garantizar que el virus no mute en una forma más grave.
La OMS afirma que el estudio es bueno, pero advirtió de que las personas «tienen que tener mucho cuidado con lo que está pasando».
«Estudios como éste son realmente útiles para aumentar el conocimiento general y saber que, en condiciones de laboratorio, podría transmitirse entre personas», ha dicho el portavoz de la OMS, Gregory Hartl.
La cepa, no obstante, ha demostrado en el estudio unos signos clínicos relativamente suaves en hurones, ya que todos los animales infectados con el virus presentaron síntomas un máximo de siete días y todos se recuperaron de la enfermedad. Y los casos en que murieron o quedaron en estado grave fueron provocados por causas adicionales.
DC/Reuters