El grupo de ochos delincuentes que actuaron en la ciudad de Nueva York, fueron detenidos gracias al blindaje de cámaras que hay en la localidad luego de los atentados del 11 de septiembre. Hasta ahora se desconoce el paradero de los autores intelectuales que actuaron simultáneamente en redes de internet.
El robo necesitó de un total de 40.500 operaciones, donde sustrajeron información de los usuarios y accedieron a una docena de cuentas de tarjetas de débito prepagadas parea viajeros que fueron emitidas por el National Bank of Ras Al-Khaimah (Emiratos Árabes) y el Bank of Muscat (Omán).
A la célula neoyorquina le bastó así con utilizar como arma de asalto en los cajeros cualquier tipo de tarjeta magnética, que ellos mismos trucaban con la información que le facilitaban los piratas para retirar el dinero en el momento indicado.
Los ocho implicados en Nueva York retiraron 2,8 millones en dos operaciones relámpago en este flashmob criminal. Se ejecutó en dos tandas: una en diciembre pasado, que sirvió de tanteo, y una más amplia en febrero.
El primer ataque se realizó en tres horas; el segundo en unas diez horas. La célula neoyorquina ejecutó 3.750 transacciones. Solo hay un robo que supera esta cuantía en la historia de Nueva York, cuando una banda asaltó en 1978 la terminal de Lufthansa en el aeropuerto de John F. Kennedy y se hizo con un motín de cinco millones.
Con información de El País