Las explosiones ocurrieron en dos mezquitas de musulmanes sunitas, que registraron graves daños. El techo de una de éstas se desplomó, dijo el agente policial, Mohammad Jamil Khan.
Los templos están situados en el pueblo de Baz Darrah, en el distrito Malakand de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa, dijo Badshah Rehman, agente de la policía local.
Shahid Alí, que estaba en la primera mezquita que fue atacada, dijo que la explosión ocurrió justo cuando los devotos iniciaban las oraciones del viernes.
Yo salí corriendo con otros y vi a varias personas sangrando y llorando, dijo Alí a The Associated Press por teléfono. Había polvo y humo alrededor.
Alí corrió a la segunda mezquita luego de que fue atacada, y vio que su techo había cedido y estaba en llamas.
Mucha gente está sepultada bajo los escombros, señaló.
Los rescatistas intentaban recoger cadáveres y lesionados, dijo Rehman.
El doctor Zardost Khan del Hospital Dargai, dijo que 35 heridos fueron tratados en el nosocomio. Asimismo un muerto fue trasladado a su hospital mientras que otros heridos y algunos moribundos fueron llevados a otros centros de salud en el área.
Nadie se ha atribuido la responsabilidad de los ataques, pero es probable que la sospecha recaiga en el Talibán paquistaní.
El grupo extremista ha estado empeñado en una insurgencia sangrienta contra el gobierno desde hace años, que ha provocado la muerte de miles de civiles y de personal de seguridad. El ejército paquistaní ha lanzado varias operaciones contra los rebeldes en el noroeste, pero han demostrado resistencia y continúan realizando ataques casi a diario.
El Talibán lanzó recientemente una serie de atentados durante las elecciones nacionales del 11 de mayo en un intento para hacerlas fracasar. Los paquistaníes desafiaron al grupo rebelde al acudir en grandes cantidades a emitir su sufragio.
DC/Panorama