El religioso dio sus declaraciones al ser consultado sobre la expulsión ayer de Nicaragua de cuatro dirigentes políticos venezolanos, incluido un exgobernador del Estado de Carabobo, opositores al Gobierno de Nicolás Maduro, aliado del presidente nicaragüense, Daniel Ortega.
El jerarca advirtió que «el pensamiento único, el partido único, (propicia la) incapacidad de entenderse por el diálogo y de apagar todo intento de pluralismo».
La preocupación de los obispos latinoamericanos está basada en que un pensamiento único es contradictorio con el diálogo, y por lo tanto, con la razón y el pensamiento, explicó Báez.
Lo contrario a esto, alegó, es «construir una sociedad que tiende a la pereza mental, al fanatismo y al rechazo del razonamiento y de la argumentación».
El obispo instó a los nicaragüenses a esforzarse «en construir una sociedad pluralista, donde prevalezca el Estado de derecho» y puntualizó que sólo exponiéndose a escuchar ideas contrarias se construye una sociedad pacífica.
«Cuando estos canales se cierran, surgen otras vías que nadie quiere», alertó.
EFE