En sus conclusiones sobre la situación de la economía española, difundidas hoy en Madrid, el FMI reconoce que la reforma laboral del pasado año supuso mejoras sustanciales y está teniendo impacto, pero la considera insuficiente.
El organismo internacional reclama ir «más allá» y sin retraso en una nueva reforma que abarate el despido, reduzca el número de diferentes tipos de contratos y simplifique la negociación colectiva.
El Fondo pide también mecanismos más inmediatos que permitan adelantar la generación de empleo, entre ellos la bajada de las cotizaciones a la Seguridad Social, que tendrían que compensarse con un aumento de la imposición indirecta.
Al mismo tiempo, considera que habría que buscar un acuerdo social entre patronal y sindicatos para que los empresarios se comprometan a generar incrementos significativos en el empleo a cambio de que los trabajadores acepten una «significativa moderación salarial».
A juicio del FMI, un incremento significativo en el empleo y una reducción de la inflación «serán cruciales» para que la bajada de salarios no penalice la capacidad adquisitiva de los hogares.
El Fondo Monetario advierte a España de que un ajuste fiscal demasiado rápido podría dañar su crecimiento económico y ha subrayado que «no son deseables» medidas adicionales para este año.
Indica que los nuevos objetivos del Gobierno de reducción del déficit estructural a medio plazo logran un equilibrio «razonable» entre la reducción del déficit y el apoyo al crecimiento.
Por otra parte, el FMI valora la actual solidez del sistema bancario español, pero aconseja reforzar la calidad y la cantidad del capital de las entidades, prudencia en el reparto de dividendos, sanear las carteras crediticias y deshacerse con rapidez de activos tóxicos.
DC/Globovisión