El Ferrari de Massa sufrió dos choques en Montecarlo, y en el mismo punto, Saint Devote. El primero, por un error de pilotaje, en los últimos entrenamientos libres, por lo que se quedó fuera de la sesión de clasificación, y el segundo ya en carrera, por una avería en la suspensión. Su coche resultó seriamente dañado.
El director del equipo Ferrari, Stefano Domenicali, confía en que el problema no se repita. «Por supuesto que nos concentramos en los problemas de fiabilidad, que deben ser resueltos. El equipo está completamente motivado y esperamos que lo de Mónaco sea un incidente aislado», comentó.
Maldonado también necesitará un nuevo chasis en Montreal después de su accidente en Montecarlo, al tocarse con el Marussia de Max Chilton en la zona de Tabac.
EFE