Prepararte para una entrevista de trabajo debe llevar el mismo cuidado que el de la elaboración de tu currículo.
Si llegas desprevenido, ansioso o confundido, por mucho que estés capacitado perderás la oportunidad de quedarte con el empleo.
Por más que creas que debes solo ser tu mismo, no está de más que sigas estos consejos y respondas de manera equivocada a preguntas simples y frecuentes en una entrevista de trabajo.
1.- ¿Por qué estudiaste esa carrera?
Mouné ha explicado que, con esta pregunta, se busca detectar coherencia, confianza en uno mismo, capacidad para la toma de decisiones e independencia. Por lo tanto, se deben evitar respuestas del tipo: «No me daba la nota», «Porque mis padres me lo dijeron» o «Porque mis amigos la eligieron».
2.- ¿Qué es lo que más y lo que menos te gusta de tu profesión?
Ante todo, nunca se deben hacer críticas destructivas de anteriores empresas, ni anteriores jefes. «Se deben explicar las ventajas e inconvenientes de la profesión desde una actitud constructiva, y cuando se hable de los inconvenientes, enfocarlos como aprendizajes», dice Mouné.
Además, la experta de Manpower ha añadido que «lo importante es transmitir profesionalidad y demostrar que aunque haya cosas que gusten menos se llevará a cabo el trabajo porque forma parte de las responsabilidades».
3.-¿Cómo se definiría? O ¿Cuáles son sus cualidades y/o defectos?
Carolina Mouné ha recomendado hacer un análisis previo sobre estas cuestiones antes de acudir a la entrevista porque «siempre» se preguntan aspectos positivos y negativos. «Se puede preguntar al entorno más cercano para que te definan, porque es más objetivo». En concreto, los puntos débiles se deben enfocar como áreas de mejora y como aspectos que también tengan un lado positivo.
También, es importante aportar «las acciones que se llevan a cabo para mejorar los puntos débiles, además, de interrelacionar todo con la posición a la que se opta», ha afirmado Martín.
4.- ¿Qué conoce sobre nuestra empresa?
Con esta pregunta se mide la planificación, el análisis del detalle y la orientación comercial. Por ello, ambas expertas coinciden en que se debe realizar un análisis previo de la empresa en la que vamos a ser entrevistados. «Es una pregunta obligatoria y, en muchas ocasiones, los candidatos reconocen no haber mirado la página web».
5.- ¿Por qué eres la persona idónea para el puesto? ¿Qué puedes aportarnos?
Permite señalar las aportaciones diferenciales de cada uno. Hay que responder desde la sinceridad y la humildad porque «no se puede menospreciar al resto de candidatos aunque sean competencia», ha explicado Mouné.
Mientras, María José Martín cree que «hay que poner en valor todos los aspectos profesionales y las experiencias laborales anteriores para ejemplificar todo lo que se puede aportar».
6.- ¿Prefieres trabajar sólo o en equipo?
Depende del trabajo, pero cada vez se valora más, «saber y poder trabajar en equipo», ha dicho la experta de Adecco. Aunque, Martín ha matizado que «no hay repuesta mala porque dependerá del puesto a desarrollar».
7.- ¿Cómo actuás ante un problema laboral?
Seguramente el entrevistador te pedirá que pongas algún ejemplo y digas como saliste airoso de la confrontación. Por ello, se debe explicar la situación específica y ceñirnos a ese momento, cómo lo vivimos, cómo lo resolvimos y qué aprendimos de la situación. «Se aconseja tener alguna situación pensada porque es una pregunta frecuente». En este caso, la pregunta trata de investigar «la capacidad resolutiva, cómo afrontar el estrés y la tolerancia a la frustración».
8.- ¿Por qué quieres cambiar de trabajo?
Cuidado con esta pregunta. Nunca se debe hacer críticas sobre nuestra empresa actual. «Se pueden argumentar las razones que nos hacen estar en esta situación como posibilidad de desarrollo profesional, aprender de otros sectores, etc», ha afirmado Mouné. Por contra, los motivos económicos o cercanía a domicilio no son valorados de forma positiva.
9.- ¿Cómo te ves dentro de cinco años?
Sirve para indagar en los planes futuros, en si la persona querría continuar en la compañía por mucho tiempo ya que la mayoría de empresas buscan perfiles estables. «Cuando se incorporan nuevos empleados hay una inversión por parte de la compañía en la formación y si alguien ya afirma que se ve en otro lugar de aquí a un tiempo, puede interpretarse como inestabilidad», ha afirmado la experta en recursos humanos de Adecco.
María José Martín ha añadido que «esta explicación también da pistas claras a la empresa de cómo trabajar el desarrollo profesional del trabajador».
10.- ¿Tienes alguna pregunta?
Lo mejor es llevar alguna cuestión ya preparada que denote interés e inquietud por el trabajo. Por ejemplo: ‘¿por qué surge esta vacante?’ o ‘¿cuáles son los siguientes pasos del proceso de selección?’. «No es recomendable preguntar sobre salario, al menos en el primer encuentro, ni pedir feedback de la entrevista», ha matizado Carolina Mouné.
En resumen, María José Martín señala que el candidato debe responder a las preguntas con la máxima sinceridad, explicando ejemplos que refuercen el mensaje y poniendo en valor todos aquellos puntos que pueden fortalecer su candidatura en el puesto y que demuestren todo lo que puede aportar. «No hay respuestas correctas e incorrectas, ni perfectas. El candidato debe mostrarse realmente como es».
Por su parte, Carolina Mouné aconseja dedicar un tiempo a la preparación de la entrevista: conocer la empresa, el puesto que se demanda, si se puede al entrevistador, a través de redes sociales, llevar pensados tres aspectos positivos y tres a mejorar, situaciones más complicadas, cómo nos vemos en un futuro, qué puedes aportar, etc.
DC/ actualidad.com