El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, ordenó este viernes la revisión de los programas de erradicación de cultivos ilícitos en la zona del Catatumbo (noroeste), en respuesta a una de las demandas de los campesinos que se mantienen en paro desde hace un mes en esa región.
«Tenemos que revisar nuestra estrategia, no sólo para el Catatumbo, sino para las demás regiones donde estamos erradicando», dijo Santos al explicar que se estudiarán los programas de cultivos alternativos viables para garantizar la calidad de vida de los labriegos.
El jefe de Estado subrayó sin embargo la importancia de la aplicación de estos programas de erradicación para reducir la producción de hoja de coca y amapola en el país.
El mandatario programó una reunión este viernes con el vicepresidente Angelino Garzón para analizar la crítica situación en el Catatumbo, donde los campesinos mantienen bloqueadas las principales vías de acceso a la región, lo cual ha ocasionado una grave situación de desabastecimiento.
El diálogo entre delegados asignados por el gobierno y campesinos se rompió el jueves en el municipio de Tibú, donde se han presentado desde el mes pasado fuertes disturbios con un saldo hasta ahora de cuatro muertos y más de 50 heridos.
Tras el rompimiento de las conversaciones se presentaron este viernes nuevos enfrentamientos entre manifestantes y miembros de la policía antidisturbios, en los cuales dos personas resultaron gravemente heridos por explosivos artesanales.
El vocero de los campesinos, César Jerez, dijo a periodistas que cada vez se unen más labriegos a las manifestaciones y que no piensan ceder a la petición del gobierno de levantar el paro para retomar los diálogos.
«El proceso está estancado, el gobierno se levantó de la mesa exigiendo el cese del paro. Nosotros seguimos con toda la voluntad de avanzar en la lucha por las reclamaciones sociales de esta región», indicó.
Jerez añadió que los campesinos exigen la presencia del presidente Santos o en su defecto del vicepresidente Angelino Garzón, así como de delegados de la Organización de las Naciones Unidas como garantes del proceso de negociaciones.
Otra de las exigencias del sector campesino es la formalización del Catatumbo como zona de reserva campesina, figura en la que el gobierno entrega terrenos baldíos a campesinos sin tierras, exclusivamente para su explotación.
En la actualidad existen en el país seis zonas de reserva campesina ubicadas en lugares de alta presencia de grupos alzados en armas.
Entre tanto, la Asociación Nacional de Zonas de Reserva Campesina anunció este viernes que los campesinos de los Departamentos del Cauca, Guaviare y La Macarena manifestarán mañana sábado su apoyo a los labriegos del Catatumbo.
Santos ha sido enfático en que no permitirá que por medio de la «presión» los campesinos del Catatumbo reclamen esta zona de reserva.
Texto: Xinhua