Los One Direction presentaron hoy «This Is Us», un documental dedicado a sus seguidoras que refleja la rutina de ensayos, bromas y legiones de fans que acompañan al carismático quinteto británico durante una gira mundial.
Es su primer largometraje y refleja uno de sus mayores periplos, remarcan Harry Styles, Liam Payne, Zayn Malik, Niall Horan y Louis Tomlinson, todos rozando los veinte años.
Pese a su juventud, son protagonistas de uno de los mayores éxitos musicales recientes, con dos álbumes de estudio que han vendido más de 30 millones de discos en todo el mundo y que les ha hecho ganar 63 premios, entre ellos varios galardones de la cadena musical MTV.
«Quería mostrar lo que son estos chicos, su sencillez y naturalidad. Son como son y no han cambiado, pese a la fama en la que viven desde hace tres años», apuntó hoy el director del documental, Morgan Spurlock, en una rueda de prensa en Londres.
Spurlock, conocido por «Super Size Me» (2004), un experimento alimentario sobre McDonals, defiende cómo su proyecto de la banda juvenil, grabado en 3D, supone un acercamiento humano a un fenómeno global -han sido número uno en 35 países- que ha sido sólo posible gracias a la tenacidad de las fans.
«Tenemos las mejores fans del mundo», aseguró Liam Payne, una opinión que comparten sus compañeros de grupo y que es repetida en el documental en varias ocasiones, ya que a ellas va dirigido este proyecto.
«Esta película es para las fans, para que vean lo que hay detrás de cada espectáculo que hacemos, para que entiendan cómo somos en realidad», añadió Harry Styles.
One Direction surgió en 2010 como resultado del «reality» musical británico «X Factor», al que sus cinco integrantes, cuatro británicos y un irlandés, se presentaron inicialmente en solitario.
No se conocían y no ganaron el concurso, pero su aparición en televisión desató una locura que se ha expandido por todo el mundo. «This Is Us (Esto es lo que somos) es el diario de la segunda de sus giras mundiales, iniciada en febrero pasado.
«Fue extraño estar todo ese tiempo con cámaras alrededor», comentó Styles, mientras el director explicaba los pormenores de una grabación que se realizó principalmente entre Londres, Tokio, México, Nueva York, los fiordos noruegos o Ghana, además de otro centenar de ciudades.
«Pero no éramos conscientes de que estábamos haciendo una película, no pensábamos en ello», agregó velozmente Zayn Malik.
Las risas y bromas que se dedica el grupo son manifiestas y, aunque van acumulando experiencia y soltura mediática, acuden a la rueda de prensa tímidos y titubeantes e incluso con sonrojo en el caso de Niall Horan, aunque las preguntas personales se dirigen a Malik.
Suyo es el momento más emotivo de este documental «sin sexo ni drogas, más bien familiar» de hora y media de duración, que muestra una conversación privada con su madre justo después de que ésta entre por primera vez en la casa que acaba de comprarle su hijo, tras una vida llena de penurias.
«Se trataba no sólo de mostrar sus actuaciones musicales, sino cómo son y cómo es su relación con sus familias. Fue complicado porque tienes poco tiempo en el metraje para aglutinar todas las historias», explicó Spurlock.
En el montaje final tuvieron un papel decisivo los chicos, que escogieron imágenes simpáticas en hoteles y anécdotas viajeras para intercalar los fragmentos dedicados a entrevistas, conciertos y grabación de canciones, que ocupan el 60 por ciento del documental.
«Es más íntimo que un documental de Justin Bieber o Katy Perry», aseguró el director, que retrata en la película la vida de los One Direction cuando están en casa y pueden volver a la vida que llevaban antes de convertirse en un fenómeno musical.
Para el quinteto la cosa es más sencilla: todo por y para sus fans, aunque «cada vez se encuentran más chicos, sobre todo en Estados Unidos», entre los seguidores, que tienen sus diferencias, apuntó Liam Payne.
«Las japonesas son más educadas, pero por regla general todas son muy parecidas, no importa la nacionalidad», comentó Tomlinson, que aseguró que para conseguir el éxito han trabajado «como un equipo, por un lado las fans y por otro nosotros».
La última pregunta se centra también en las seguidoras. «¿Irían a tocar a cualquier sitio del mundo por ellas, incluso a territorio palestino ocupado?», inquiere una periodista.
«Por supuesto. Iríamos encantados a cualquier sitio donde tengamos fans», responde Liam Payne, mientras el resto de sus compañeros asienten.
Fuente: Globovisión