El futbolista galés Gareth Bale fichó por el Real Madrid, anunció este domingo el club merengue sin confirmar el monto de la operación, que según la prensa, estaría en torno a 100 millones de euros, lo que podría convertirle en el jugador más caro de la historia.
El jugador zurdo, de 24 años, que ha sido 41 veces internacional con la selección galesa pero que no ha ganado ningún gran trofeo, ha firmado por las próximas seis temporadas procedente del Tottenham, precisó el Real Madrid en un comunicado publicado en su página web.
“Gareth Bale es nuevo jugador del Real Madrid”, anunció el club en la red social Twitter.
La prensa inglesa y española había estado especulando en las últimas semanas sobre el fichaje de Bale por el Real Madrid por un monto cercano a los 100 millones de euros.
El diario madrileño AS cifró el viernes en 91 millones de euros (121 millones de dólares) el precio definitivo del traspaso de Bale, tres millones menos de lo que le costó al club blanco el portugués Cristiano Ronaldo, fichado del Manchester United en 2009.
El técnico portugués del Tottenham André Vilas-Boas aseguró la semana pasada que esperaba que el club londinense recibiese un montante récord por el traspaso del jugador.
El galés Gareth Bale no ha ganado ningún gran trofeo, pero a sus 24 años, este genial atacante, nombrado dos veces mejor jugador de la Premier League se ha convertido en uno de los jugadores más caros de la historia del fútbol.
Faltan por confirmar las cifras de la operación, pero la prensa especuló en las últimas semanas con un traspaso que rondaría los 100 millones de euros, con lo que Bale arrebataría el récord de fichaje más caro de la historia del fútbol a Cristiano Ronaldo, que fichó por el Real Madrid por 80 millones de libras (94 millones de euros) en 2009.
Pero, entonces, el portugués llegó con tres ligas inglesas (2007, 2008, 2009), un Liga de Campeones (2008) y un Balón de Oro 2008, bajo el brazo.
Su nuevo compañero galés, que sólo ha ganado una Copa de la Liga inglesa en 2008 sin disputar la final, ha brillado sobre todo por su precocidad.
Originario de Cardiff, debutó con sólo 16 años y 275 días en la Segunda División inglesa con el Southampton contra el Millwall el 17 de abril de 2006. Fue una victoria y un estreno lleno de promesas. Alineado como lateral izquierdo, su principal puesto entonces, acabó atrayendo la atención de los mayores clubes ingleses.
Cortejado por Manchester United, Chelsea y Arsenal, elige finalmente el Tottenham, que le ofrece el mejor lugar, según él, para seguir creciendo. El club londinense lo ficha el 25 de mayo de 2007 por 12,5 millones de euros.
A pesar de unos comienzos esperanzadores, también hubo tropiezos. Llegado con la etiqueta de pequeño genio en potencia, Bale sufre lejos de los suyos y con la presión de la Premier League que empieza a descubrir. También se ve afectado por varias lesiones, probablemente más fruto de su malestar que de una posible fragilidad física.
Encadenó así 24 partidos de Premier League seguidos sin victoria y pareció empezarle a perseguir una imagen de gafe, que Harry Redknapp intentó romper el 26 de septiembre de 2009 haciéndolo entrar en juego en Burnley cuando el Tottenham ganaba 5-0.
El técnico inglés tuvo un papel clave en la carrera del galés. Le devolvió la confianza, lo protegió y lo reposicionó como extremo izquierdo para acabar viendo como explotaba como jugador.
El 20 de octubre de 2010, en la fase de grupos de la Liga de Campeones, el internacional galés (41 veces convocado con la selección, 11 goles) humilla a Maicon y castiga a la defensa del Inter de Milan con un hat-trick mágico que no sirvió, sin embargo, para impedir la derrota de los suyos (4-3).
Para conservar su joya, Tottenham le prolonga el contrato con una revalorización salarial en mayo de 2010, marzo de 2011 y junio de 2012.
Tras emerger, hacer dudar y resucitar, llega la temporada 2012-2013. Rara vez un jugador ha sido el pilar fundamental de un equipo principal como lo ha sido Bale. Como Cantona en el Manchester United o Thierry Henry en el Arsenal, Bale cultiva la “Bale-dependencia”.
Sin él, los Spurs se convierten en un equipo medio. Con él, rivalizan con los mejores. Marca 26 goles, contando todas las competiciones, la mayor parte de ellos decisivos, y es elegido mejor jugador del año por segunda vez en tres temporadas (2011, 2013).
DC/ AFP
Foto: London24