Este fin de semana la Major League Soccer (MLS) vio un relámpago en el partido entre los New York Red Bulls y el Houston Dynamo. A solo siete segundos de iniciado el partido, el delantero australiano Tim Cahill abrió el marcador para los neoyorquinos con un golazo de volea que dejó atónita a toda la fanaticada del estadio.
El ex del Everton arrancó su carrera hacia el arco rival tras la patada inicial y controló un pase largo de su compañero Dax McCarty antes de girarse instantáneamente para disparar un potente derechazo desde fuera del área que mandó el balón hacia las redes defendidas por el guardameta Tally Hall.
Con el tanto, Cahill volvió polvo el antiguo récord del gol más rápido de la MLS, sostenido desde el 2003 por Dwayne De Rosario, quien logró su hazaña en 11 segundos.
Luis Santander/@santander205/Daily Mail
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