México sigue esperando que Venezuela entregue más información por los canales diplomáticos y «basada en pruebas» sobre la avioneta mexicana destruida en territorio venezolano, dijo el lunes el gobierno, que no ha informado si se produjo la anunciada reunión con el embajador de Caracas.
«Seguimos en espera y lo estamos haciendo de manera diplomática, con toda seriedad», sobre los ocupantes del avión y la carga que traía, dijo el ministro de Gobernación (interior), Miguel Ángel Osorio Chong, en una conferencia de prensa.
El presidente Nicolás Maduro afirmó el sábado que la aeronave de matrícula mexicana, que fue obligada a descender e incinerada la semana pasada, estaba «full (lleno) de cocaína» y mostró su extrañeza porque el gobierno mexicano hubiera enviado una nota diplomática pidiendo información tras hacerse pública la destrucción de la avioneta.
El mismo sábado, el gobierno mexicano respondió asegurando que Venezuela no le ha informado sobre el contenido hallado en la aeronave y convocó para este lunes al embajador de Caracas, Hugo José García Hernández, para esclarecer los hechos.
Este lunes Osorio Chong afirmó que «ha habido declaraciones (del gobierno de Venezuela) pero nada formal» e indicó que su gobierno espera «información basada en pruebas, información real».
Hasta la tarde del lunes el gobierno mexicano no había informado sobre la comparecencia del diplomático.
La aeronave privada ingresó sin autorización a espacio aéreo venezolano el 4 de noviembre pasado para aterrizar en una pista clandestina, tras haber sido perseguida por 40 minutos, sin que se supiera nada sobre sus ocupantes.
El gobierno de Venezuela difundió imágenes del avión incinerado, luego de que militares lo destruyeron.
Osorio Chong precisó el lunes que Venezuela ya informó sobre los mecanismos que siguieron para bajar el avión, pero que México espera saber «quiénes son los pasajeros y si los tienen» (las autoridades venezolanas).
Las autoridades mexicanas dieron a conocer el domingo que la aeronave partió de Querétaro, en el centro de México, con siete ocupantes que presentaron identidades falsas, incluidos el piloto y copiloto.
Antes de ser destruida en Venezuela, la aeronave había hecho una escala en la isla de Bonaire, en las Antillas Holandesas, donde se quedaron cuatro de sus ocupantes.
«Es importante llegar hasta sus últimas consecuencias», enfatizó Osorio Chong, al considerar que los únicos que pueden tener información sobre los ocupantes de la avioneta son las autoridades de Venezuela.
DC/Globovisión