Tras un duro accidente que le cercenó una de sus patas delanteras y que le impedía desplazarse, “Schildi”, nombre de la particular tortuga, pudo volver a caminar gracias a una pieza de Lego y una rueda implantada por un veterinario alemán.
El dueño del reptil viajó desde Sttutgart hasta Neuried para llevarla a una clínica veterinaria debido a la infección que se le generó en su extremidad amputada. Allí los médicos improvisaron y decidieron poner un juguete de Lego, para reemplazar a la pierna.
El responsable de esta interesante forma de curación es el veterinario Marcelo Bürkle, quien se inspiró viendo a uno de los juguetes de Lego de su hija.
Bürkle utilizó una de las ruedas de un carro de la misma empresa para hacer que la tortuga pudiera caminar de nuevo.