Su nombre es Sheyla y tiene 32 años y es adicta a sus pechos. Se ha gastado unos 200.000 euros en 22 operaciones para conseguir sus pechos de la talla 155 triple K e incluso se ha hecho quitar costillas para dejar espacio en su delgada constitución para sus implantes de más de 6 kilos. ¿Qué opinas, cómo se ve?
DC/ mibrujula.com