El pasado 15 de junio “primó (entre quienes votaron) el deseo de una paz con cambios y con justicia social, por encima de la opinión que les merecían” el candidato oficial Santos y su opositor Óscar Iván Zuluaga, aseguró, en entrevista divulgada por el diario El Espectador, alias Pablo Catatumbo, miembro del secretariado mayor de las FARC y del equipo negociador en La Habana.
“Lo que gana es el anhelo de la gente por la paz…no la visión particular que sobre la paz pueda tener Juan Manuel Santos”, puntualizó el líder rebelde, que reconoció que el resultado en las urnas “implica una obligación para todas las partes en las mesas de diálogo”.
Santos se alzó en segunda vuelta con la reelección de su mandato por otros cuatro años al obtener del 50,9 % de los votos frente al 45% conseguido por Zuluaga, apadrinado por el expresidente Álvaro Uribe (2002-2010), quien prefiere combatir militarmente a las organizaciones delictivas.
El primer mandatario enarboló como bandera la continuación de las negociaciones con las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), que se adelantan en Cuba desde noviembre de 2012, y el inicio de conversaciones exploratorias con el segundo grupo guerrillero, el Ejército de Liberación Nacional (ELN).
Catatumbo, cuyo verdadero nombre es Jorge Torres, pidió a Santos que se “deslinde de todo lo que representa Uribe y opte por la justicia social y el cambio” y lo llamó a “abrir los ojos a un espectro político diverso” en referencia a los sectores políticos de izquierda que lo respaldaron en las pasadas elecciones, pero que ya han declarado que, en adelante, volverán a la orilla opositora salvo en asuntos de paz.
El gobierno y las FARC han alcanzado acuerdos preliminares en asuntos agrarios, de participación política y lucha contra el narcotráfico. En los próximos días retomarán las negociaciones para discutir la reparación de las víctimas del conflicto, a lo que Catatumbo catalogó como “el primer paso para la reconciliación”.
Respecto al futuro proceso con el ELN se desconoce dónde tomará lugar y cuál será la agenda de negociación.
Santos, que tomará posesión de su nuevo cuatrienio el próximo 7 de agosto, tendrá que llevar a buen puerto la firma de los acuerdo con las guerrillas. Para ello, contará en el Congreso con el apoyo de los partidos de La U, Liberal y Cambio Radical, y tendrá que lidiar con la oposición del movimiento Centro Democrático, liderado desde la Cámara Alta por el ahora electo legislador Álvaro Uribe. No es claro de qué lado se alineará el tradicional partido Conservador, otrora miembro de la coalición oficialista.
Agencia/DC/@diariocontraste