El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo el domingo que el grupo islamista palestino Hamas violó su propio ofrecimiento de una nueva tregua humanitaria por 24 horas en la Franja de Gaza, horas después de que se reanudaran los enfrentamientos en el enclave costero.
Consultado sobre si Israel aceptaría una nueva propuesta para detener las hostilidades, Netanyahu dijo a la cadena CNN: «Hamas ni siquiera acepta su propio cese al fuego, continúa disparando (proyectiles) mientras hablamos». Netanyahu agregó que Israel «tomaría cualquier acción que considere necesaria para proteger a su pueblo».
Previamente el domingo, Hamas anunció que aceptaría llevar a cabo una nueva tregua de 24 horas en el conflicto con Israel enque podría comenzar dentro de una hora, dijo portavoz del movimiento, después de que se hubieran reanudado los feroces combates.
«En respuesta a la intervención de la ONU y considerando la situación de nuestro pueblo, y con ocasión del Eid, se ha acordado entre las facciones de la resistencia apoyar una pausade 24 horas, desde las 2 pm (hora local) del domingo», dijo a Reuters Sami Abu Zuhri. Un funcionario israelí dijo entonces que la tregua estaba siendo revisada.
Sin embargo, las 2 pm llegaron y pasaron, y el sonido de los fuertes bombardeos israelíes se podía escuchar dentro de Gaza junto con las sirenas en las comunidades israelíes cerca de la frontera, lo que también sugería que los militantes palestinos habían continuaban lanzando proyectiles.
Israel decidió poner fin a una tregua de 24 horas a primera hora del domingo, después de que Hamas empezara a lanzar cohetes hacia el sur y el centro de su territorio, mientras que médicos palestinos dijeron que al menos 10 personas habían muerto en la ola posterior de ataques que barrieron Gaza.
Unos 1.060 palestinos, la mayoría civiles entre los que hay muchos niños, han muerto en los 20 días de conflicto. Israel dice que 43 de sus soldados han perdido la vida, junto con tres civiles por fuego de mortero y cohetes al otro lado de la frontera del enclave mediterráneo.
Agencias/DC