El superintendente de Precios Justos, Andrés Eloy Méndez, aseguró que las cadenas de supermercados asumirán costos de las máquinas captahuellas que se instalarán en los establecimientos para combatir el contrabando interno.
“Las empresas privadas son las que van a pagar eso, no el estado“, expresó.
Méndez indicó que el sistema no plantea restricciones por cantidades sino la verificación posterior de recurrencia de compra de cada persona.
El presidente de Ansa, Luis Rodríguez, expresó que las redes de supermercados apoyan el proceso. «Cualquier iniciativa que se tome, nosotros la apoyaremos, este sistema va a garantizar el abastecimiento y ayudará a todas las familias venezolanas».
Igualmente, Andrés Eloy de Cándido, representante de Ansa por el estado Zulia, informó que el sistema biométrico contará con un tiempo estimado de 40 segundos a un minuto, donde la persona deberá registrarse con la presentación del documento de identidad y su huella Dactilar.
Méndez anunció que este martes sostendrá una reunión con el Ministerio del Trabajo, las cadenas de supermercados y los comercios de artículos de primera necesidad para tratar medidas laborales con respecto al personal.
Asimismo aseguró que no solo los supermercados implementarán el sistema biométrico, sino también cadenas como Farmatodo, Locatel, farmacias y establecimientos comerciantes de productos básicos.
Con respecto a la cantidad de máquinas necesarias, Méndez indicó que cuentan con unas 400 máquinas que están a primera mano. Sin embargo aseguró que “no hay todavía una cifra de todas las máquinas que se necesitan, pero no hay duda de que se importarán las que se tengan que importar”.
Emen/Agencias