Una fiebre alta alertó a la familia Constante Arteaga de que su hijo no estaba en buenas condiciones y de inmediato lo trasladaron a la emergencia del hospital “Dr. Adolfo Prince Lara” en Puerto Cabello, estado Carabobo, para que los especialistas lo atendieran. Para su sorpresa ésa sería la última noche que pasarían con su hijo antes de ser presuntamente raptado por desconocidos.
A las 6:00 de la mañana de ayer cuando Ridenia Arteaga de 38 años de edad regresó al recinto hospitalario a verificar el estado de salud de su pequeño de tan solo 27 días de nacido, se percató de que no se encontraba en el retén de cuidados infantiles e inmediatamente avisó a los efectivos de seguridad del hospital de lo sucedido, pero no hubo respuestas ante los gritos y la desesperación de la madre.
Wilmer Rodríguez, tío del neonato raptado, contó que él y su esposa estuvieron en el hospital hasta las 11:00 de la noche en compañía de los progenitores del bebé, pero como no permitieron que ningún familiar se quedara, decidieron marcharse y regresar al otro día muy temprano. “Se supone que aquí (hospital) hay vigilantes para que estén pendiente de todo el que entra y sale. ¿Cómo se van a llevar a un niño y nadie va a ver nada?”, pronunció molesto el familiar.
Asimismo, indicó que en el Servicio de Neonatología “Dr. Rafael Tortolero” del “Prince Lara” no existe un control para identificar a las progenitoras de los bebés que allí se encuentran recluidos.
“Todo el que viene, entra y dice que va a ver a cualquier bebé y lo puede hacer porque ni las enfermeras reconocen cuál es la mamá de cada uno de ellos”.
Extraoficialmente trascendió que entre las personas retenidas por el Cicpc para las labores de investigación se encuentran el médicos de guardia, enfermeras, vigilantes. En horas de la noche, funcionarios de la Policía Científica trabajaban en el caso.
Cintia González Perozo/Notitarde
Foto: Luis Ceballos