El superintendente Nacional de Precios Justos, Andrés Eloy Méndez, afirmó que el sistema biométrico se implementará para atacar el contrabando de alimentos, el cual consideró no solo se práctica en la frontera sino también dentro del territorio nacional.
Méndez negó que los controles para acceder a la compra de productos vayan a paralizar el comercio. “El que compra razonablemente no verá la diferencia, el control es para el que compra un producto hasta 20 veces», dijo.
De acuerdo con el seguimiento de la aduana hasta el comercio, el cual anunció en días pasados, aseguró que la intención es establecer los productos que se adquieren con dólar a tasa Sicad o Cencoex: «Es necesario que nos pongamos un poco en cintura, a veces se le pide que se ponga en cintura al pueblo, pero no se le pide al empresario en cuanto a sus ganancias. La finalidad es la defensa del salario del pueblo venezolano».
Aseveró que el rango de compras será amplio y descartó que sea un racionamiento.
En cuanto a la instalación del sistema biométrico detalló que se ha reunido con miembros de supermercados y farmacias, con quienes ha tratado el tema del margen de ganancias, el uso del captahuellas y el tema de las colas.
“Es fácil echarle la culpa al gobierno de las colas, pero hay establecimientos que tienen hasta 40 cajas y solo funcionan 6 (…), puede ser ineficiencia, pero en otros casos estoy seguro de que se trata de un sabotaje para culpar al gobierno de las colas”.
El Nacional/DC