El primer ministro, David Cameron, calificó el asesinato del rehén británico, David Haines, como un «acto de maldad pura» y prometió que el Reino Unido hará todo lo posible para llevar a los miembros del Estado Islámico ante la justicia.
«Esto es un asesinato despreciable y atroz de un trabajador humanitario inocente. Es un acto de maldad pura», dijo en un comunicado difundido por su oficina de Downing Street.
«Haremos todo lo que esté a nuestro alcance para perseguir a estos asesinos y asegurarse de que se enfrentan a la justicia, sin importar el tiempo que haga falta.»
AFP/DC