Las parroquias Libertad y Alonso de Ojeda del municipio Lagunillas serían las más afectadas según la Concejal y Presidente de la Comisión Permanente de Infraestructura del Concejo Municipal, Elayne Pire. La causa es el brote de aguas negras que la hidrológica de Maracaibo no ha podido atender por falta de recursos.
La edil lagunillense asegura que la jurisdicción afronta una verdadera guerra bacteriológica y es promovida por el propio gobierno que no atiende las enfermedades, los malos olores y la contaminación del agua potable.
“Lagunillas está a punto de una emergencia sanitaria. Las aguas negras corren por las calles y no existen ninguna esperanza de que la situación sea resuelta puesto que Hidrolago asegura que no tiene los recursos ni los equipos para hacerlo” detalló.
Así mismo, agregó que la planta de tratamiento inaugurada en 2006 no funciona, de las dos estaciones de bombeo que existen en el municipio sólo trabaja una, ubicada en la parroquia Libertad, con capacidad del 25 por ciento.
Alertó que el agua estancada es un potencial vector para la propagación del dengue y el chikungunya.
Ángel Núñez/DC