Los músculos del abdomen funcionan igual que el resto de los músculos y, si bien es cierto que hacer abdominales tiene múltiples beneficios, no es conveniente entrenar un mismo grupo de músculos todos los días ya que la fatiga se puede acumular y este exceso de entrenamiento puede derivar en sobreentrenamiento y producir lesiones.
Con la edad los procesos de recuperación se hacen más lentos debido a las alteraciones del entorno hormonal y, si la fatiga llega a ser crónica por exceso de entrenamiento, la recuperación total puede durar semanas e incluso meses. Es por esto que debemos planificar correctamente cada sesión de entrenamiento alternando sesiones de alta intensidad con sesiones de recuperación o baja intensidad.
Por otro lado, debemos tener claro que para lograr un abdomen plano y definido es necesario ser disciplinados a la hora de comer y realizar ejercicios aeróbicos siguiendo las pautas de un estilo de vida saludable. Es un mito que haciendo más abdominales quemaremos más grasa en determinada zona y además teniendo una mala alimentación, solo haremos más fuertes los músculos debajo de la capa de grasa que los cubre.
El abdomen es una zona llena de vasos sanguíneos, lo que ayuda a que la recuperación del entrenamiento sea más rápida que otros grupos musculares. Con solo 24 horas de recuperación o descanso es suficiente.
Entonces, lo recomendable será incluir 3 ejercicios (4 series de entre 20 y 25 repeticiones cada ejercicio) al final de la sesión de entrenamiento, 2 o 3 veces por semana en días no consecutivos.
Aun cuando existen un sinfín de ejercicios y combinaciones para fortalecer los abdominales, los ejercicios básicos siempre son los mejores y más efectivos:
Las planchas
Los abdominales en banco o pelota
Elevaciones de caderas
Giro ruso
Los abdominales en máquina
Recuerda: Un músculo descansado rinde mejor y crece más rápido.
ErikaTipoweb/AliceHernández