El vicepresidente argentino, Amado Boudou, solicitó su sobreseimiento en la causa judicial en la que está procesado por supuesta falsificación de documentos públicos.
Boudou, actualmente a cargo de la presidencia por el viaje de Cristina Fernández de Kirchner a Estados Unidos, presentó un escrito ante la Sala Segunda de la Cámara Federal un día antes de la audiencia que había sido fijada para mañana. Evitó así tener que exponer oralmente ante la Cámara.
El vicepresidente fue procesado por el juez Claudio Bonadío, quien afirmó que «transfirió en su favor el vehículo (…) mediante documentación falsa». En los papeles presentados hay firmas apócrifas y se declara un supuesto domicilio falso de Boudou.
Las víctimas
Los abogados del vicepresidente afirmaron en el escrito que Boudou y su exesposa Agustina Seguin fueron «víctimas» del gestor que se encargó de realizar el trámite de transferencia, señalaron fuentes judiciales citadas por la agencia local DyN. El gestor también se encuentra procesado en la causa judicial.
Boudou «no tenía por qué cometer una irregularidad ya que el vehículo Honda estaba a su nombre», indicaron.
La Sala Segunda de la Cámara Federal deberá ahora ratificar o revocar el procesamiento de Boudou.
El vicepresidente informó en sus declaraciones juradas que compró el vehículo en julio de 1992, pero la Justicia constató que en ese momento aún no había sido importado en la Argentina desde Japón. Su ex mujer asegura que fue adquirido en 1993 y lo considera un bien ganancial del matrimonio, por lo que reclama el 50 por ciento que le correspondería.
Boudou fue procesado además en otra causa por supuestas negociaciones incompatibles con su cargo. Es acusado de supuestamente haber ejercido su influencia cuando ejercía como ministro de Economía para conseguir el levantamiento de la quiebra que pesaba sobre la principal imprenta de billetes del país, Ciccone Calcográfica, y que quedara en manos de supuestos allegados suyos.
DPA/DC