Las autoridades mexicanas anunciaron hoy la cancelación del desfile conmemorativo de la Revolución Mexicana por las marchas que se llevarán a cabo mañana en favor de los 43 estudiantes desaparecidos en Iguala, en el sureño estado de Guerrero.
La parada deportiva, con unos 8.000 participantes, fue cancelada «para evitar contratiempos con las diversas movilizaciones programadas para mañana», señaló la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal en una nota informativa, informó Efe.
La conmemoración de la Revolución de 1910 es una de las fiestas cívicas más importantes del país y desde hace varias décadas el desfile deportivo ha sido el principal evento, junto con la condecoración de militares a cargo del presidente de México.
El desfile estaba programado para celebrarse este jueves en el Zócalo de la Ciudad de México, la principal plaza pública del país, donde este jueves confluirán diversas marchas encabezadas por los familiares y compañeros de los jóvenes desaparecidos el 26 de septiembre pasado.
Desde las primeras horas de este día se retiraron del Zócalo capitalino las gradas para los espectadores que ya habían sido instaladas.
Fuentes de la Secretaría de la Defensa confirmaron a Efe la cancelación del desfile, si bien un portavoz de la Presidencia dijo que no estaba previsto.
La ceremonia de ascensos para personal de las Fuerzas Armadas que normalmente transcurre en el Palacio Nacional, situado en el ala este del Zócalo, fue trasladada para el campo militar Marte, donde será encabezada por el mandatario Enrique Peña Nieto.
Los legisladores de la Asamblea de Representantes del Distrito Federal, cuya sede está cercana a la plaza central, celebraron hoy de manera anticipada su sesión prevista para el jueves, a fin de mantenerse lejos de la zona durante las manifestaciones.
Tres caravanas con familiares y estudiantes de Ayotzinapa que salieron hace una semana de Guerrero para recorrer el país confluirán este jueves en la capital mexicana y encabezarán las protestas para exigir justicia para los 43 jóvenes desaparecidos.
Según integrantes del cártel Guerreros Unidos, los estudiantes fueron detenidos por policías la noche del 26 de septiembre pasado en Iguala y entregados a ese grupo criminal, que se encargó de asesinarlos e incinerarlos.
La fiscalía mexicana mantiene a los jóvenes bajo el estatus de desaparecidos hasta que pruebas genéticas realizadas a restos humanos encontrados en un basurero de Cocula, vecino a Iguala, confirmen que se trata de ellos.
Agencia | DC