En rueda de prensa, el ahora ex secretario general del Movimiento Tupamaro en Portuguesa, Honorio Pérez, informó que su expulsión de la organización es parte de “un acuerdo” entre el secretario nacional de esa organización, José Pinto y el gobernador Wilmar Castro Soteldo, quien el pasado fin de semana “compró” la tarjeta de ese partido.
“Es un bochornoso acto que forma parte de la serie de abusos y atropellos que se han cometido también contra dirigentes de otros estados del país”, dijo Pérez, quien detalló que Pinto “negoció el partido a nivel nacional por su curul a la Asamblea Nacional”, a cambio de respaldar en las regiones todo lo que haga y plantee el PSUV.
Acompañado del alcalde del municipio Unda, Oswaldo Zerpa, del ex legislador Orangel Sequera, el ex alcalde de Araure Rafael “Chato” Vásquez, concejales, y una gran cantidad de personas, Pérez expresó su repudio a la forma “cínica y tramposa” en que actuó Pinto en su visita a Guanare, donde luego de reunirse con el Gobernador en su Residencia, ofreció declaraciones desde la sede de la Secretaría de Seguridad Ciudadana de la Gobernación y se hospedó en un hotel propiedad del gobierno.
Pérez, expresó que fue víctima de una campaña de mentiras y calumnias propias de la derecha fascista y encabezada por el secretario nacional de Los Tupamaro junto a un reducido grupo de secuaces en Portuguesa. Dijo que su situación no fue tratada en un secretariado nacional y su expulsión no es otra cosa que una actuación anti democrática que vulnera los estatutos y que viene de “un caudillo autócrata”.
Aclaró que ni su persona, ni el alcalde Zerpa violentaron los estatutos de la organización y sus declaraciones siempre se refirieron de manera crítica a las actuaciones del PSUV y de funcionarios que no están trabajando por el bien de la revolución.
El Nacional | DC