En su último artículo, en el diario el Nazional, la excelente teórica de la comunicación y antigua “vaca sagrada” del periodismo, continúa la cantaleta (que no es más que los deseos de la gran mayoría de los opositores) de que Venezuela es país en ruinas y quebrado, y que nos encontramos de primero en los indicadores y ranking negativos del mundo en; competitividad, corrupción, retardo burocracia, asesinatos y retardo procesal. En fin estamos bien jodidos y de último en todo.
Así de jodido y quebrado ha estado el país desde hace 15 años como lo ha venido repitiendo en los programas de radio y televisión con el contrasentido de gozar en todo momento de una larga lista de anunciantes estúpidos, que a pesar de las noticias negativas que transmite invierten en un país en quiebra.
La escritora, de su madre patria (España) y maracucha de “corazón” escribió varias obras, de lectura y consulta obligada para los periodista, semiólogos y estudiantes de comunicación social. La Profesora Colomina, se traicionó a sí misma, al dejar de lado los principios éticos y la obligada comunión entre la teoría y la praxis. Esta violación de principios y del Código de Ética del periodismo, no es exclusivo de esta investigadora sino que la acompañan otros gurúes como; Marcelino Bisbal, Gloria Cuenca, Tulio Hernández y toda buena parte de esa generación de periodistas y anclas que prefirieron el periodismo ligth y palangrista,” al ejercicio profesional, riguroso y combativo de la comunicación.
La inmensa mayoría de estos docentes, alienados y asalariados de los dueños de los medios, son los que están formando a las nuevas generaciones de periodistas full “fashionistas” o metrosexuales, alejados de la deontología profesional, vacios de contenido y copia del periodismo amarillista y basura gringo.
Seguiré admirando y releyendo su trabajo teórico con excelentes obras como: “El Huésped Alienante”, “La Celestina Mecánica”, “Comunicación y Democracia en América” y “Los Medios de Comunicación de Masas y el Estereotipo del Delincuente” y viéndola con tristeza y pena ajena, víctima del alzeimher o como la matrona alejada de la deontología profesional periodística, aliada de los financista y dueños del “huésped alienante”.
¡Chávez Vive! ¡La Lucha Sigue ¡
DC / Alfonso Méndez Moran / alfonsomendezm@hotmail.com / @alfonsomendezm