El vicepresidente estadounidense Joe Biden y el mandatario turco Recep Tayyip Erdogan concluyeron el sábado una reunión de casi cuatro horas sin ofrecer indicios de que sus países hayan superado sus divergencias sobre cómo enfrentar a los combatientes del grupo extremista Estado Islámico y al presidente sirio Bashar Assad.
Biden anunció nueva asistencia de Estados Unidos por 135 millones de dólares para los civiles sirios —cifra que incluye a algunos que se encuentran en Turquía, donde hay 1,6 millones de refugiados_, pero ambos funcionarios no ofrecieron detalles sobre cómo van a trabajar conjuntamente para incrementar la participación de Ankara en la lucha de la coalición internacional contra los combatientes del grupo Estado Islámico en los vecinos Siria e Irak.
El escenario era propicio para alcanzar una posición común en sus estrategias diferentes para Siria: la elegante residencia de Erdogan en Estambul da hacia el Puente del Bósforo que conecta a Europa y Asia. Sin embargo, si hubo acuerdos, éstos quedaron en privado.
En declaraciones a la prensa al cabo de su reunión, Biden y Erdogan elogiaron la relación de seis décadas entre ambos aliados de la OTAN.
Sin embargo, ninguno hizo referencia a la base aérea de Incirlik, en Turquía, que Estados Unidos desea utilizar para lanzar ataques contra los extremistas del EI en Siria e Irak. Biden sólo mencionó brevemente los planes turcos para adiestrar y equipar a combatientes sirios moderados, pero no dio detalles.
Ninguno mencionó la propuesta de Turquía para que se imponga una zona de exclusión aérea, o zona de seguridad, en el norte de Siria, donde los combatientes de la oposición apoyados por Occidente podrían estar a salvo de la fuerza aérea de Assad.
Biden indicó que ambos conversaron con bastante detalle sobre Irak y Siria, y dijo creer que la relación entre Estados Unidos y Turquía «es tan firme como siempre».
«Nosotros necesitamos a Turquía, y creo que Turquía considera que también nos necesita», apuntó.
Erdogan señaló que él y Biden conversaron sobre Irak, Siria y otros temas globales, y que ambos tienen planes para continuar este tipo de conversaciones.
«Hemos advertido con gusto que tenemos la misma opinión que Estados Unidos en torno a la mayoría de los temas que examinamos. Confirmamos nuestra decisión de mejorar nuestra cooperación. Y aún más importante, al ser dos aliados de la OTAN, confirmamos una vez más nuestro compromiso con la defensa y la seguridad mutuas», afirmó Erdogan.
Un funcionario de alto rango del gobierno estadounidense señaló que hubo avances en la reunión y que tanto Biden como Erdogan lograron un mejor entendimiento sobre las necesidades de ambos países.
El funcionario señaló que Estados Unidos y Turquía coincidieron en que es necesario derrotar al EI, adiestrar a las fuerzas sirias moderadas —incluso en una base en Turquía_, y que se requiere una transición política en Siria sin Assad.
Dicho funcionario carece de autorización para revelar detalles sobre la reunión y habló a condición de guardar el anonimato.
AP / DC