Un grupo de trabajadores de la Morgue de Bello Monte expresaron su malestar por el colapso de la tubería de aguas negras ubicada en la sala de autopsias, en el sótano de la edificación.
Esto ha provocado que desde hace seis días se inunde la estructura donde someten a necropsia a los cuerpos que son llevados a la Medicatura Forense.
La situación fue denunciada a la directiva de la dependencia pero no se han tomado los correctivos, señalaron los empleados del organismo, quienes prefirieron mantener su nombre en reserva.
Los patólogos y asistentes se ven obligados a usar botas plásticas para laborar en el área, y están trabajando con el «riesgo de contraer infecciones».
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