Bajo un envolvente aroma y con un toque de picor al gusto; el jengibre, un rizoma que crece bajo la tierra, se caracteriza por aportar un toque especial en las preparaciones en las cuales se le incluye.
Sus bondades van mucho más allá del buen aroma; al prepararse en forma de té y mezclado con limón ayuda a combatir el refriado común gracias a propiedades como antibiótico natural, antiinflamatorio y antibacteriano.
Entre otra de sus muchas bondades se puede resaltar que el jengibre se incluye entre los alimentos que promueven la felicidad gracias a que ayuda al cerebro a segregar endorfinas; por otra parte promueve la pérdida de peso ya que estimula los jugos gástricos y de esta manera, evita que se fermenten los alimentos durante su tránsito en el tracto digestivo.
Son muchas las recetas en las cuales se le puede incluir, como en la receta de las clásicas galletas de navidad, en una aromática sangría con especias, muffins de jengibre, entre muchas otras.
DC – NE
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