Estados Unidos y Cuba se congratularon este miércoles por su «productiva» y «constructiva» discusión sobre asuntos migratorios sostenida en La Habana, en el primer día de diálogo de alto nivel entre ambos países desde 1980.
«La naturaleza productiva y colaborativa de la discusión de hoy prueba que, pese a las claras diferencias que persisten entre nuestros países, Estados Unidos y Cuba pueden encontrar oportunidades para avanzar en nuestros intereses mutuamente compartidos», dijo a la prensa Alex Lee, jefe de la delegación norteamericana en el dialogo migratorio, el primero tras la reconciliación entre ambos países, anunciada el 17 de diciembre, informó AFP.
Lee expresó que seguirán vigentes en Estados Unidos la Ley de Ajuste Cubano de 1996 y la política de pies secos/pies mojados, normas muy criticadas por La Habana, que afirma que estimulan la emigración ilegal desde la isla.
«Explicamos al gobierno de Cuba que mi gobierno está completamente comprometido con el respeto de la Ley de Ajuste Cubano», y que se mantendrá la política de pies secos/pies mojados, dijo Lee.
La Ley de Ajuste concede a los cubanos privilegios que no tiene ningún otro inmigrante en Estados Unidos, mientras que la política de pies secos/pies mojados, aplicada en los últimos 20 años, permite a los cubanos ilegales que pisan territorio estadounidense quedarse legalmente en ese país, pero aquéllos capturados en el mar son devueltos a la isla.
Por su parte, la jefa de la delegación cubana, Josefina Vidal, saludó el «constructivo» diálogo migratorio, efectuado en la víspera de una reunión que abordará el restablecimiento de las relaciones diplomáticas tras medio siglo, pero criticó la persistencia de la Ley de Ajuste y la política de pies secos/pies mojados.
«La parte cubana enfatizó que a pesar de las medidas tomadas, medidas eficaces, eficientes, tomadas por los servicios de ambos países, la persistencia de la política de pies secos/pies mojados y la Ley de Ajuste Cubano, contradicen la letra y el espíritu de los acuerdos migratorios», dijo Vidal.
Ellas «siguen siendo el estímulo principal a la migración ilegal, al tráfico de emigrantes y a las entradas irregulares a Estados Unidos desde terceros países de ciudadanos cubanos que viajan legalmente al exterior», afirmó.
«La parte cubana también señaló que no están siendo devueltos a Cuba todos los emigrantes ilegales cubanos interceptados en alta mar, lo cual es contrario a los acuerdos migratorios» de 1994 y 1995, dijo Vidal.
La funcionaria cubana afirmó que Washington sigue estimulando la deserción de médicos cubanos que cumplen misiones en terceros países.
«Señalamos que (eso) no se corresponde con el contexto bilateral actual de las relaciones entre Cuba y Estados Unidos», añadió.
DC | Agencia