Siete hombres de nacionalidad china vivieron momentos de zozobra ayer en la mañana en la residencia en la que viven desde hace siete años. A las 7:10 am el personal de cocina que atiende a una comisión de 40 ciudadanos chinos que participan en proyectos de la Misión Vivienda fue sometido por 4 delincuentes cuando salía a botar la basura en la quinta Kokocha, de la urbanización La Florida, en Caracas.
Una de las víctimas del robo, que habla español, relató que los delincuentes se bajaron de un vehículo rojo para entrar a la fuerza en la residencia.
«Nos amarraron las manos, nos dieron golpes y nos sometieron con pistolas para abrir la caja fuerte y se fueron», dijo Ju Feng Cen, conocido también como Alex Cen.
Además de estar nervioso por la situación, Cen manifestó su rechazo en contra de la inseguridad que hay en el país.
«No es justo que nos roben. Aquí trabajamos por los pobres, los ancianos, las personas con discapacidad y por los más necesitados. Tenemos siete años trabajando con Jacqueline Farías, con las obras de la Misión Vivienda y de la Oficina Presidencial de Planes y Proyectos Especiales; además, colaboramos con el gobierno para instalar ascensores en barrios como el 23 de Enero y Casalta. Gracias a Dios que no hubo muertos», dijo.
Huyó para pedir auxilio. Se pudo conocer que mientras las siete personas estaban maniatadas, una de ellas logró huir por la parte de atrás de la residencia y al llegar a un parque de la zona, que es custodiado por funcionarios de Policaracas, pidió auxilio.
Después de las declaraciones de Cen, al lugar llegó una comisión de la División contra Robos del Cicpc para realizar las inspecciones en el lugar y tomar declaraciones a las víctimas.
Mientras los agentes de la policía judicial realizaban su trabajo, una de ellas relató que los delincuentes se robaron, por lo menos, 10.000 dólares, 500.000 yuanes y 500.000 bolívares que sacaron de la caja fuerte. Además, se llevaron 20 computadoras portátiles y 10 teléfonos inteligentes.
Luego de que las víctimas hablaron con funcionarios del Cicpc no dieron más declaraciones a la prensa. Cen solo precisó: ³Fue un robo cuantioso; imagínese cuántas personas viven aquí². Posteriormente el hombre se subió a una camioneta que manejaba un venezolano y se retiró de la zona.
Más temprano, el asesor chino había señalado que temía que sus superiores en Shangai les pidieran que se regresen a su país: ³Cuando les reportemos a los altos jefes lo que ocurrió pueden mandarnos una orden con boletos aéreos para que nos devolvamos a nuestro país, pero aquí tenemos muchas obras abiertas².
Alcabalas contra el crimen. Ayer en la mañana la tensión rondó las adyacencias de la quinta Kokocha. Además de la presencia de los funcionarios del Cicpc, algunos vecinos dijeron que para estar más seguros en la urbanización tuvieron que invertir para construir alcabalas de seguridad que son custodiadas por vigilantes.
Como en la residencia en la que viven los ciudadanos chinos no hay cámaras de seguridad, los pesquisas de la policía judicial solicitaron los videos de la cámara de la vivienda que está al frente de esa quinta, pero los dueños de esa propiedad explicaron que está fuera de servicio desde el último apagón que se registró en la zona.
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