En un año electoral tan complejo como será 2015, es de suponer que el uso de los recursos públicos para hacer campaña se exacerbará superando ampliamente la cantidad de transmisiones oficiales contabilizadas hasta el momento. Lo que permite pensar esto es que la estrategia comunicacional de Nicolás Maduro puede considerarse, en buena medida, una copia de la empleada por su antecesor, Hugo Chávez Frías. Maduro —como en su momento ocurrió con Chávez— al parecer no sabe cómo realizar un acto oficial de Gobierno sin incurrir en violaciones a las leyes electorales, la ley anti corrupción y la propia Constitución. Incluso aunque en el acto oficial se encuentren rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE).
1.¿Cuántas cadenas se realizaron el año pasado?
Según la medición realizada por @cadenometro, entre los meses de enero y diciembre de 2014 Maduro realizó 163 transmisiones oficiales de radio y televisión.
“Yo no tengo ninguna duda, de verdad se los digo y nos veremos las caras dentro de un año aquí, bueno, los que sean candidatos… yo no tengo ninguna duda de que la Revolución Bolivariana va a tener una gran victoria en las elecciones parlamentarias de este año 2015. ¡No tengo dudas de eso! Ni un ápice de duda. Si hoy por hoy fueran las elecciones, las fuerzas revolucionarias superarían por más de de diez puntos a las fuerzas de la derecha. Ustedes lo saben!”
Minutos después, el Presidente agregó:
“Lo que sí estoy seguro es que el pueblo chavista le va a dar una gran victoria a la memoria de Hugo Chávez en las elecciones que se hagan este año para la Asamblea Nacional. ¡No tengo duda de eso!”.
En este caso concreto del mensaje anual a la Nación, Nicolás Maduro utilizó a los medios del Estado durante tres horas con un valor aproximado de Bs. 46.571.073. Y varios minutos de esas tres horas las utilizó para proselitismo político.
Pues bien: durante el año 2013, Nicolás Maduro (primero en su condición de Presidente encargado y luego como Presidente electo y juramentado) utilizó las cadenas presidenciales en un promedio de 28 minutos cada día. No obstante, durante el período de campaña para las elecciones municipales del 7 de diciembre de 2013, el promedio aumentó a 45 minutos diarios de transmisiones oficiales.
Horas de Nicolás Maduro en Cadena Nacional
Cabe acotar que el evento que ha provocado que Maduro utilice más las transmisiones oficiales está asociado con las protestas del mes de febrero de 2014, cuando utilizó las transmisiones oficiales de radio y televisión durante 84 minutos cada día.
Aunque existe una disminución importante en la cantidad de transmisiones oficiales entre 2013 y 2014, no ocurre así con la cantidad de horas que se dedicaron para estos actos oficiales: en 2013 Maduro empleó 169 horas para realizar transmisiones oficiales, mientras que en 2014 usó 174 horas en transmisiones oficiales.
Además, aquel CNE le prohibió al presidente participar en mítines electorales y en cualquier otro acto público que sirviera para promover las candidaturas de aspirantes a la Asamblea Nacional Constituyente, así como la transmisión de los programas ¡Aló, Presidente! y De frente con el Presidente, que se transmitían por Venezolana de Televisión y Radio Nacional de Venezuela.
Después de esta sanción, las nuevas directivas del organismo comicial han rechazado aprobar el inicio de averiguaciones administrativas contra el presidente Hugo Chávez o Nicolás Maduro con distintos argumentos entre ellos decir que todo lo que ocurre antes del inicio formal de la campaña electoral escapa del control del organismo comicial.
Puesto en números, entre 2006 y 2014 la mayoría compuesta por las rectoras del CNE rechazaron en 14 oportunidades las solicitudes presentadas desde la Comisión de Participación Política y Financiamiento para iniciar averiguaciones administrativas contra el Jefe del Estado por el uso de las transmisiones oficiales para realizar proselitismo político. Incluso, el 17 de septiembre de 2008 la mayoría de los rectores acordaron incluir al programa ¡Aló, Presidente! en la categoría de programas de opinión, los cuales no pueden ser regulados por el CNE.
DC | Vía Prodavinci /Eugenio G. Martínez