Mil 48 alumnos es la matrícula de la facultad de Veterinaria de la Universidad del Zulia (LUZ). Al menos la mitad asiste a la prácticas de campo. Sale a las 6:00 de la mañana de la dependencia y retorna a las 7:00 de la noche. A esa hora, la oscurana mete miedo más de lo normal, pues Veterinaria está ubicada en medio de un terreno que el núcleo humanístico le cedió hace unos 20 años.
No hay un bombillo, ni un poste eléctrico, ni lámparas suficientes para alumbrar. En el estacionamiento le han robado el carro a más de un estudiante y profesor, y también han “enfríado” unos cuántos robados. “Esos son los problemas aquí: la falta de alumbrado adentro y afuera y la inseguridad”, aseguró un trabajador de la Dirección de Seguridad Integral (DSI), quien no se identificó.
Unos cinco atracos reportan a la semana los alumnos de Veterinaria. Los delincuentes se esconden entre la maleza y sorprenden a las víctimas en las caminerías, que comunican la facultad con el acceso a la Circunvalación 2 (Maicaíto).
“Solo la semana pasada se vieron policías del plan Patria Segura en el campus. Hoy -lunes- solo vi dos motorizados de la DSI en la entrada de Maicaíto. Ellos no dan abasto para proteger a toda la población universitaria que es transeúnte. Vigilancia con suficiente personal es lo que necesitamos”, denunció José Gabriel Rincón, dirigente estudiantil.
Sin respuestas. El decano de Veterinaria, José Manuel Rodríguez, declaró que instalaron cerco eléctrico en la azotea de la facultad, porque los delincuentes se trepaban el techo e ingresaban a los salones para robar. Hizo un llamado a la Oficina de Planificación del Sector Universitario (OPSU), para que les doten de vehículos. “Esta es una carrera que es práctica. Los estudiantes necesitan hacer sus trabajos de campo y es una odisea viajar, porque no contamos con el transporte”.
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