Según las Sagradas Escrituras, hay varios tipos de ayuno cristiano, el profeta Daniel, tomo la
decisión de no tomar ningún tipo de carne, vino, ni manjares delicados en Daniel 10:2, aquí se trata
de un ayuno parcial.
Gracias a este ayuno parcial de 21 días el profeta Daniel tuvo la revelación y la visita del Arcángel
Gabriel el cual le reconfortó y le dio la profecía para los últimos tiempos.
Este ayuno parcial, también lo utilizan algunos predicadores y evangelistas, para afrontar campañas
de evangelismo. Ellos solo toman zumos de frutas cada varias horas y así pueden afrontar los días
previos y de campaña para poder tener mayor comunión, orando y leyendo la palabra de Dios. De
esta manera ellos pueden tener la energía suficiente para ministrar pero privando a la carne y
poniéndola en servidumbre.
También para las personas que tienen dificultad de poder ayunar completamente, ya sea por razones
de trabajo o por fuerza de voluntad propiamente, con este tipo de ayuno pueden tener la comunión,
para poder clamar a Dios y pedir las fuerzas necesarias de hacer ayunos completos.
Cabe aclarar que este tipo de ayuno no se tiene que convertir en una muletilla para substituir el
verdadero ayuno que es el total. Pues es que practicaban los siervos de Dios en las Sagradas
Escrituras. Pero es un principio para poder acometer mayores retos.
¿Como ayunar?
¿Cuantas clases de ayuno hay?
¿Como tengo que orar cuando ayuno?.
Estas son algunas preguntas que se suele hacer el cristiano. En esta sección hablaremos sobre los diferentes tipos de ayuno bíblicos que aparecen en la Biblia, el poder del ayuno cristiano y la oración combinados y como deberá actuar para que su ayuno sea reconocido y aceptado por Dios.
Cuando uno realiza un ayuno de varios días, tiene que tener en cuenta que es mejor tomar agua, a no ser que Dios te haga una petición expresa, pues
sin su ayuda es poco prudente no tomar agua.
Si nos fijamos en las escrituras en Mateo 4:1-2
“Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado por el diablo. Y después de haber ayunado 40 días y 40 noches, tuvo
hambre”.
También en Marcos 1:13 dice lo siguiente, que los ángeles en el desierto le servían, (podemos suponer que se trataría de agua, pues lo más normal, es
que hiciera mención antes que tenía sed antes que hambre, y no hace mención sin embargo a esto en las escrituras).
En el momento que los cristianos entienden que se puede realizar el ayuno tomando agua, se siente liberados y con la posibilidad de contemplar más
días de ayuno, de tal manera pueden obtener mayores victorias al estar dirigidos por la inspiración del Espíritu Santo.
Cuando uno realiza el ayuno no es conveniente tomar agua muy fría pues podría afectar al estómago.
En la Palabra de Dios nos indica que según la ley había un día específico para realizar ayuno, este
era el día decimo del mes séptimo, en el cual todo el pueblo de Israel se afligía delante del Señor y
ofrecían ofrenda grata delante de Jehová. En este día nadie trabajaba y era completo día de reposo y
dedicado y de reconciliación con Dios. El horario que hacían era desde las seis de la tarde del día
noveno a las 6 de la tarde del día decimo, que es cuando se pone el sol en el estado de Israel.
Qué bueno sería que todas las iglesias, practicaran este tipo de ayuno para buscar a Dios, toda la
congregación en unidad, desde el pastor hasta el último de la iglesia, quebrantando y clamando
rostro en tierra, como un solo hombre, igual que el pueblo de Israel clamaba a una.
Los cambios que se producirían en las iglesias, se transformarían y el Señor obraría de manera
poderosa.
En el libro de Jueces 20:26 encontramos lo siguiente
“ Entonces subieron todos los hijos de Israel, y todo el pueblo, y vinieron a la casa de Dios; y
lloraron, y se sentaron allí en presencia de Jehová, y ayunaron aquel día hasta la noche; y
ofrecieron holocaustos y ofrendas de paz delante de Jehová “.
Podemos encontrar en el libro de Joel 2:15:
“Tocad trompeta en Sión proclamad ayuno , convocad asamblea. Es ayuno de toda la congregación, y en la palabra añade: Reunid al pueblo,
santificad la reunión, juntad a los ancianos, congregad a los niños y a los que maman, salga de su cámara el novio, y de su tálamo la novia.“
En el versículo 17 añade que en el ayuno, el pueblo ha de estar entre el altar y la entrada, que lloren sacerdotes, ministros de Dios, para así interceder a
Jehová y que les perdone de pecado.
También en el versículo 21, dice que Jehová hará grandes cosas y el 23: Y hará descender lluvia. En estos versículos hemos de apreciar que el llamado
era para toda la congregación, incluyendo niños, niños de pecho y recién casados. Esto es cuando la iglesia se propone de todo corazón para ninguno
se pierda, sino que todos van a una.
Si toda la iglesia se dispusiera en su corazón y buscase de esta manera al Señor, desaparecería toda tibieza y mediocridad de y veríamos al Espíritu
Santo obrar de forma poderosa en todos los ámbitos de la iglesia.
Ya va siendo hora que las iglesias practiquemos este tipo de ayuno y así limpiaríamos muchísimas raíces de pecado, las cuales están tan impregnadas
en nuestro ser que es necesario ayuno y oración para que el Señor pueda obrar y arrancar todas nuestras iniquidades.
Si la iglesia se pusiese a orar desde las 6 de la mañana hasta las 6 de la tarde, todos unidos en el templo orando y quebrantados en espíritu y en
verdad, veríamos las maravillas de Dios obrando poderosamente en nuestras iglesias.
Por poner un ejemplo, si cada uno de nosotros en lugar de estar delante del televisor durante tantas horas, o leyendo libros de literatura del mundo, o
practicando deporte que como dice el apóstol Pablo a Timoteo: el ejercicio corporal para poco aprovecha. Lo dedicáramos a buscar al Señor, y a
colocarlo en primer lugar en nuestras vidas, esto se convertiría en un avivamiento en nuestras vidas, por consiguiente en un avivamiento en nuestras
familias, iglesias, barrios, ciudades, regiones y por último nuestra nación.
Me gustaría aclarar, que no estoy diciendo que no se pueda hacer lo antes mencionado, pero si que hemos de examinarnos interiormente, si realmente
estamos poniendo al Señor en primer lugar en nuestras vidas. Como dice el apóstol Pablo:
«Todo me es lícito, pero no todo me conviene; todo me es lícito, pero no todo me edifica.«
Por último decir del ayuno de congregación es la manera de actuar tal como está la sociedad a día de hoy, el como Dios quiere que se vuelvan las
iglesias.
Para poder ayunar lo ideal sería poder estar dedicado a la oración y lectura de la palabra, no obstante, hay muchas personas que les gustaría poder
realizar ayunos de más días, o con más frecuencia, la única manera es hacerlo en días de trabajo. De todas maneras podemos hacer lo siguiente.
Antes de comenzar la jornada nos dispondremos unas horas antes para buscar en oración, si la jornada laboral es partida, también se puede en el
momento que los compañeros comen, uno ha de buscar el lugar para poder orar, y por último cuando se termina la jornada de trabajo, es un buen
momento para buscar a Dios, pues después de todo el día la carne está en servidumbre y nuestro espíritu está en posición de liderazgo. De esta
manera es posible ayunar trabajando, también durante la propia jornada uno está en comunión con el Señor, teniendo siempre presente el objetivo por el
cual ayunamos.
Estamos en los tiempos postreros, la mies es mucha y pocos los obreros, yo les animo a que dispongan su corazón y busquen primero el reino de Dios
y su justicia, pidan al Espíritu Santo que les dirija en los motivos para ayunar y de esta manera obtendrán grandes victorias, que Dios les bendiga.
DC | Reflexión Cristiana | Foto: Web