A golpes asesinaron a un vigilante de 75 años dentro de un galpón en la avenida 17 de Haticos. Los trabajadores encontraron amarrado a Dimas Silva. En el establecimiento, los dueños guardan las herramientas, equipos y materiales de una construcción, que se desarrolla a escasos metros del lugar.
Una unidad de la Policía regional, perteneciente a los cuadrantes de la parroquia Cristo de Aranza, resguardó la escena, mientras que los obreros esperaban para cumplir con sus labores.
Una vecina explicó a la Policía científica que sus perros comenzaron a ladrar fuertemente a la 1.00 de la madrugada de ayer. Al ingresar los obreros, para ubicar sus herramientas y demás enseres de trabajo se percataron que dentro del ranchito de lata, que servía como garita de vigilancia, yacía en el suelo el septuagenario.
«Le amarraron la boca, manos y piernas con un cable», relató uno de los presentes. El propietario, de descendencia árabe, se acercó para declarar ante los oficiales.
Detrás del alto portón azul, se guardaban máquinas utilizadas para las obras, como: esmeriles, taladros y demás equipos eléctricos. Al hombre lo atacaron luego que este se defendiera con lo que era su única arma,un machete.
La Policía inició las investigaciones para ubicar a los responsables y recuperar los equipos ultrajados. “Hasta ahora tenemos la información de que fueron tres los homicidas y asaltantes. Ya estamos tras su pista para capturarlos”.
Enrique Sencial, nieto de Dimas lamentó el hecho. «Era un hombre tranquilo, ya estaba mayor pero le gustaba trabajar».
Dimas vivía en el barrio el Mamón III, del sector Lucerito, parroquia Ildefonso Vázquez. El vigilante tenía más de cuatro años laborando para los dueños del galpón. Tenía cinco hijastras. Estas se enteraron por un vecino que trabaja en Haticos, al pasar por el galpón vio a la Policía, confirmó la muerte de Dimas y llamó a sus parientes.
DC – LV – Foto: Web