La Copa América-2015 llegó a su hora decisiva. Brasil, sin Neymar y sin un fútbol a la altura de su historia, quedó fuera de las semifinales que arrancarán el lunes. Desde cruces distintos, Chile y Argentina ya se miran de reojo para la gran final.
La Roja y la albiceleste son los únicos favoritos que quedan vivos en el torneo, tras las eliminaciones de Brasil y Colombia, pero además son los que tienen más urgencias para levantar el trofeo.
Argentina está presionada por acabar con una sequía de 22 años sin títulos y Lionel Messi ansía darle a su país las alegrías que ha repartido con generosidad en el FC Barcelona.
Para Chile está la obligación de ganar la primera Copa América de su historia en esta edición que disputa en casa.
La ansiedad puede ser su peor enemigo y su técnico Jorge Sampaoli reitera que deben ir paso a paso.
Antes de jugar una eventual final ante su público en el estadio Nacional, llegará el cruce de semifinales del lunes contra Perú en Santiago y la esperada resolución del escándalo Jara-Cavani, en el que la Conmebol debe decidir si sanciona al defensa chileno por su obscena provocación al delantero charrúa.
Del otro lado, Argentina jugará el martes en Concepción (sur) contra Paraguay que, al eliminar el sábado a Brasil en la tanda de penales, evitó un nuevo capítulo del clásico sudamericano.
La escuadra de Dunga, plagada de meritorios, llegó a vislumbrar las semifinales al adelantarse temprano con un gol de Robinho, cuya ‘resurrección’ en Chile dio alguna esperanza a Brasil de compensar la baja del sancionado Neymar.
Pero la ‘canarinha’ acabó cediendo ante el empuje del equipo de Ramón Díaz que empató en la segunda mitad por mediación de Derlis González, en una pena máxima cometida por Thiago Silva, y se impuso en la tanda de penales.
Con la presencia del argentino Ramón ‘Pelado’ Díaz en las semifinales, es seguro que un técnico de esta nacionalidad conquistará la Copa América. Al frente de los otros tres clasificados están sus compatriotas Sampaoli (Chile), Ricardo Gareca (Perú) y Gerardo Martino (Argentina).
El ‘Tata’ Martino dirigió el sábado una suave práctica en la que todavía se respiraba un sentimiento de alivio de los jugadores, que la víspera tuvieron que pasar por el suplicio de la tanda de penales en los cuartos pesar de que dominaron totalmente a Colombia.
Un día antes del Argentina-Paraguay, que en su partido de la primera fase empataron 2-2, habrá otra semifinal de alto voltaje entre Chile y Perú.
Sampaoli está pendiente de si podrá contar con su defensa central Gonzalo Jara, investigado por su polémica provocación al delantero de Uruguay Edinson Cavani en el partido que disputaron ambas selecciones en cuartos.
A raíz de una denuncia de Uruguay, la Conmebol anunció el sábado el inicio de un proceso disciplinario en contra de Jara que deberá resolverse antes del choque de semifinales ante Perú.
El zaguero del Maguncia alemán, que podría recibir al menos cinco partidos de suspensión, está en el ojo del huracán desde que aparentemente trató de desquiciar a Cavani durante el juego introduciéndole un dedo en el ano, una imagen que ha dado la vuelta al mundo.
Cavani, que respondió dándole un leve manotazo a Jara y fue expulsado, jugaba ese partido consternado por el accidente automovilístico que había causado su padre en estado de ebriedad, en el que provocó la muerte de un joven motociclista.
Chile ve la denuncia como un acto de hipocresía de Uruguay, a la que se considera como una especialista histórica de este tipo de artimañas.
En respuesta, el país anfitrión también presentó una denuncia en contra de siete jugadores celestes, entre ellos Cavani (PSG/Francia), por agresiones durante ese ríspido partido que acabó 1-0 para los locales.
Juegue o no Jara, La Roja necesitará poner toda su atención en Perú, que viene de ganar con facilidad a Bolivia por 3-1 en los cuartos con un triplete de su goleador Paolo Guerrero.
El ‘Depredador’ se verá las caras con Arturo Vidal, con quien comparte la cima de los máximos artilleros del torneo con tres goles.
DC – AFP