No importa si es de mañana o de noche, la hora pico ya no hace diferencia al momento de cobrar el pasaje. Los usuarios del transporte público se quejan del cobro excesivo de las tarifas. Moraima Romero, ama de casa, comentó que los carros por puestos de la línea Socorro le llegaron a cobrar 50 bolívares para que esta pudiera llegar a su casa. «A las paradas no están llegando, se desvían, eso es en todas las líneas».
En el casco central de Maracaibo se activó una fiscalización para detener los malos hábitos de algunos choferes. En lo que va de año 800 transportistas han sido sancionados por incumplir las normas establecidas en la Gaceta Oficial del municipio, según informó Jamelis Ríos, presidente del Instituto Municipal de Transporte Urbano de Pasajeros. «Todos los días se despliegan 28 fiscales en la ciudad para hacer los operativos. Aquí nos llevamos vehículos que vienen incumpliendo la instrucción de cobrar las tarifas adecuadas y que son reincidentes, aquel transportista que en una oportunidad tuvo una multa y conseguimos otra infracción le retenemos el vehículo, y en tercera instancia el permiso para el transporte puede ser eliminado».
La municipalidad es consciente de las deficiencias que tiene el sector. «El transporte público está en crisis, el 60 por ciento de las unidades no trabaja ahora porque no tienen repuestos, no consiguen baterías. Eso es un problema nacional, al igual que necesitan puntos hábiles para el combustible, pierden horas en las colas, lo entendemos, pero les decimos que tienen que respetar las tarifas del municipio».
Al menos 40 unidades se incorporaron al transporte público del municipio. «Estamos habilitando nuevas rutas con personas que están dispuestas a trabajar. Entre las rutas está La Estrella, en La Limpia que cubre parte del oeste».
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