«(Trump) no es un hombre estúpido, así que no asumo que piense que todos los mexicanos que cruzan la frontera son violadores. Está haciendo esto para inflamar, incitar y atraer la atención, que parece ser el principio organizador de su campaña» a la presidencia, añadió el exgobernador de Florida.
Bush, favorito en las encuestas sobre la carrera republicana para las elecciones presidenciales de 2016, respondió afirmativamente a la pregunta de si se toma personalmente los comentarios de Trump dado que su esposa es mexicana.
«Si, por supuesto, absolutamente, y mucha otra gente» también se lo toma personalmente, indicó Bush.
El aspirante presidencial aseguró que la estrategia que va a triunfar en las primarias es la de ser «esperanzador y optimista» y no la de «estar enfadado todo el tiempo», y consideró que Trump enarbola «una forma exagerada» de ese último enfoque.
El que fuera candidato republicano en las elecciones presidenciales en 2012, Mitt Romney, también expresó su rechazo a los comentarios de Trump.
Durante un desfile con motivo del Día de la Independencia en Wolfeboro (Nuevo Hampshire), Romney opinó que las declaraciones de Trump han hecho daño al partido republicano.
«Creo que (Trump) cometió un grave error al decir lo que dijo acerca de los mexicano-estadounidenses», aseguró Romney.
Trump defendió sus polémicos comentarios en una entrevista con la cadena de televisión Fox, y aseguró que no esperaba una reacción tan dura como la que se ha encontrado.