Cada vez que la he visto subir por las escaleritas hacia el podio de las tendencias irreversibles, les confieso, que me ha hecho sudar frio y caliente a la vez, con esos resultados que después de mis correrías triunfantes en el chavismo, sólo me han servido para saborear el amargor quemante de las derrotas tras derrotas. De manera que esta primera dama del sufragio, para nada me ha caído bien, pero a decir verdad, desde que la vi anunciar la obligatoriedad reglamentaria sobre la participación femenina, me ha provocado ir hasta su oficina y abrumarla de piropos.
Aunque ya por Ley en 1945 y bajo el mandato de Isaías Medina Angarita, había quedado estatuido el voto femenino,en la Junta de Gobierno presidida por Rómulo Betancourt, se aprobó el Estatuto Electoral del 15 de marzo de 1946, que otorgó el sufragio a las mujeres sin restricción alguna. También su rango constitucional se originó con la Constituyente impulsada por la revolución del octubre adeco. De manera que la participación femenina comienza a tener rango constitucional, apenas ha mediado del recién finalizado siglo XX. Se les había olvidado esto a los demócratas y machistas de la MUD a la hora de forjar su alianza “perfecta”.
En las esmirriadas elecciones primarias de la MUD, aquí en el Zulia sólo hubo sufragio en un circuito electoral; pues bien, allí Acción Democrática, Un Nuevo Tiempo, Primero Justicia, Voluntad Popular, Movimiento Progresista de Venezuela y hasta el último mini partido de la alianza opositora, se aliaron para aplastar y derrotar a María Pirela, la única mujer que aquí se atrevió a reivindicar su derecho a ser candidata a diputada. Los resultados no se hicieron esperar y cuando tocó presentar la maqueta electoral, el 99% de la participación machista, estaba garantizada también por estas tierras calientes y cojonudas.
Ahora bien, nuestro Chuo Torrealba, el mismo quien dijera que siete de cada diez activistas comunitarios son damas, que empezaron defendiendo a sus hijos, luego defendieron su cuadra, luego defendieron la calle y terminaron defendiendo al barrio entero. El Chuy quien siempre nos recuerda que es el hijo de Marina, olvidando su pregón feminista, le anunció pomposamente al país, que salvo María Corina Machado, Miriam Berdujo, Dinorah Figuera, Milagro Valero, Delsa Solórzano, María Gabriela Hernández, Milagro Paz, Lady Gómez y Gaby Arellano, el resto de los candidatos presentados en el país también son Hombres de pelo en el pecho.
Ver sentada a Isabel Carmona, del Frente Nacional de Mujeres y presidenta de la organización política Acción Democrática, junto a Marelys Marcano, constituyentista y delegada por UNAMUJER, aplaudiendo a rabiar a la Presidenta del CNE, cuando estaba anunciando el Reglamento Especial, para garantizar los derechos de participación política de forma paritaria, en las elecciones de diputadas y diputados a la Asamblea Nacional, definitivamente no tiene precio. Vergüenza ajena sentí por estos líderes de la MUD, que tuvieron que esperar la aprobación del justo reglamento, para entre rabietas y pataletas, tener que aceptar las pantaletas en su maqueta electoral.
Por eso, a pesar de lo pesadita que me cae la señora, no dejaré de gritar ¡Salve Tiby! ¡Salve Tibisay Lucena! Que a los trancazos reglamentarios les hicisteis recordar, que también en el mundo opositor, todas las mujeres son bellas, hermosas, inteligentes y votan.
DC/ Abog. Douglas Zabala/ @douglazabala