La compañía francesa de videojuegos Ubisoft empezó a experimentar con la realidad virtual porque cree que brindará experiencias novedosas, profundas y accesibles para todo tipo de personas.
«Lo primero que hay que tomar en consideración con la realidad virtual es su accesibilidad. Es una tecnología que permite tener experiencias nuevas y aptas para todo tipo de personas. (…) La accesibilidad es lo que hizo a Wii de Nintendo o a las máquinas de Apple tan exitosas, así que este es otro paso interesante», explicó a Efe el consejero delegado de Ubisoft, Yves Guillemot.
La compañía francesa, responsable de videojuegos como «Assassin’s Creed», «Rayman» o «Far Cry», quiso demostrar en la feria E3 de Los Ángeles que es la primera de las grandes desarrolladoras en dar un paso al frente e impulsar la creación de experiencias de realidad virtual.
La industria se empeñó en sacar adelante esta tecnología -que nació en los años 90 pero cayó en el limbo- y en 2016 llegarán al mercado tres cascos de realidad virtual: Oculus Rift (que tiene detrás a Facebook), Project Morpheus (de Sony) y Vive (que surge de la colaboración entre HTC y Valve).
Sin embargo, aunque el hardware parece cada vez más pulido, la adopción de la realidad virtual dependerá en gran medida de la existencia de juegos y experiencias atractivas.
Los primeros en subirse a la ola de esta tecnología fueron los desarrolladores independientes, aunque poco a poco se van sumando actores más grandes: Ubisoft, 505 Games y Crytek son algunos de ellos.
La compañía francesa se adelantó en este campo a Activision y Electronic Arts -las otras dos grandes desarrolladoras y distribuidoras de la industria-, aún sin proyectos públicos de realidad virtual.
«Queremos participar en definir este nuevo camino de la industria del videojuego. Solo conoces el potencial de las cosas si lo intentas y lo pruebas, por eso queremos dedicarle tiempo», sostuvo Guillemot.
«Estoy convencido de que si invertimos el tiempo necesario daremos con la experiencia idónea para la realidad virtual. No todo es válido. Debemos evitar aquello que pueda provocar mareo, pero algunas cosas son excepcionales», añadió.
El directivo considera una ventaja el hecho de que la inmersión en experiencias en 360 grados no requiera pericia para su manejo con mandos, lo que amplía su público potencial.
«Ciertamente tenemos que afrontar algunos desafíos, pero si conseguimos hacerles frente la realidad virtual puede ser muy sólida».
En la actualidad, Ubisoft trabaja en «cuatro o cinco» proyectos para esta tecnología.
Enseñó tres demos en la feria E3: el viaje en una especie de montaña rusa de «Raving Rabbids Theme Park», el enfrentamiento visual con un tipo duro de «Far Cry 3» y el multijugador «Eagle Fight», donde cuatro águilas sobrevuelan París y tratan de derribar a sus enemigos.
«Lo relevante de la realidad virtual es que te permite profundizar en los universos, así que nuestro objetivo es asegurarnos de que podemos reutilizar algunos de los mundos que hemos creado», dijo.
El directivo destacó que Ubisoft trabajará con «cualquier» actor de la industria, de hecho ya creó algunas experiencias para los cascos de Sony, Oculus VR y HTC.
La estrategia es similar a la empleada en otros campos, ya que desarrolla para todas las consolas, para móviles y también para PC. El eclecticismo en plataformas y géneros es la tónica de esta compañía de videojuegos.
«La industria va en muchas direcciones y nosotros tenemos como objetivos algunos mercados. Somos fuertes en las máquinas para juego ‘triple A’, pero empezamos a hacer negocio en móviles. (…) Es el comienzo, pero eso comienza a ser también relevante para nosotros», aseveró.
DC | EFE