Los embalses Tulé, Manuelote y Tres Ríos albergan agua para 52 días debido a la sequía que se ha prolongado sobre el Occidente venezolano y ha repercutido en una merma en las lluvias.
De acuerdo a datos aportados por fuentes cercanas al Ministerio de Ecosocialismo, Manuelote dispone de 37,05 metros, uno menos por debajo de su cota normal, ubicándolo en un nivel crítico que solo le deja tres días de agua a este embalse.
Tulé registra una cota de 27,89, tres metros menos de su volumen promedio y Tres Ríos 157,14 metros de agua, siete menos de su cota promedio. En el caso de Tulé, el agua disponible abarcaría 21 días de consumo.
Al sumar los tres embalses, que abastecen a Mara, San Francisco, Jesús Enrique Lossada, Miranda y Maracaibo, da un inventario para 52 días de agua.
Se espera que desde el Ministerio de Ecosocialismo se giren instrucciones para aplicar medidas destinadas a «estirar» el recurso hídrico disponible. Tales acciones involucrarían una modificación en el esquema actual de suministro de agua.
El embalse El Tablazo, ubicado en Los Puertos de Altagracia, tiene 33 metros de cota, diez menos por debajo de su nivel.
Entre tanto Pueblo Viejo y Machango, también ubicados en la Costa Oriental del Lago, disponen de 66,20 metros (normal) y 92,75 metros, respectivamente. Este último presenta dos metros por debajo de su promedio.
La sequía en la parte norte de Zulia se ha mantenido desde 2013, sumando casi tres años de lluvias escasas, lo que ha impedido la recuperación de los reservorios que abastecen de agua al occidente de la región.
De esta situación no escapan Cuba, Colombia, Panamá, Nicaragua y en Estados Unidos, países que también han visto mermas en sus precipitaciones debido a la influencia del fenómeno climático El Niño.
Colombia, por ejemplo, declaró emergencia por El Niño en noviembre del 2014.
En el caso del Zulia las zonas más afectadas han sido las ubicadas en la Guajira venezolana, mientras que Maracaibo y las comunidades aledañas reflejan la falta de lluvia en la muerte de árboles y la desaparición de áreas verdes por la poca disponibilidad de agua.
DC | Panorama